miércoles, 8 de junio de 2011

Sutra de la Transmigración (Bhavasankarantisutra)

Esto he oído decir: En cierta ocasión el Bhagavan se hallaba en Rajagriba, en el Bosque de Bambúes, en el lugar de los pájaros kalantakas, junto con un gran número de monjes, doscientos cincuenta en total, y de numerosos grandes bodhisattvas. Entonces el Bhagavan, completamente rodeado de muchos cientos de miles de seguidores, frente a ellos, exponía el Dharma, y enseñaba de forma perfecta la vida correcta, hermosa en su principio, en su medio y en su fin; excelente en su sentido, excelente en su expresión, carente de confusión, completa, enteramente pura y completamente purificada.
En aquel entonces, Shrinaya Bimbisara, el rey del país de Magadha, saliendo de la gran ciudad de Rajagriba, con gran fasto real, exhibiendo el gran poder real, se dirigió al Bosque de los Bambúes, donde se encontraba el Bhagavan. Una vez allí, le rindió homenaje inclinando la cabeza ante los pies del Bhagavan, lo circumbaló por tres veces y permaneció de pie a un lado.
Estando de pie a un lado, Bimbisara, el rey de Magadha, le dijo así al Bhagavan: "Oh, Bhagavan, ¿de qué manera las acciones, una vez realizadas y habiendo desaparecido, se acumulan y tras largo tiempo se manifiestan en la mente, tras el momento de la muerte? Si todos los agregados son vacíos por naturaleza, ¿de qué forma los efectos de las acciones permanecen sin destruirse?"
Habiendo hablado así Bimbisara, el rey de Magadha, el Bhagavan le respondió:" ¡Oh, gran rey! por ejemplo, un hombre que duerme sueña que goza extremadamente con una hermosa mujer, y al despertar de aquel sueño, recuerda a aquella hermosa mujer. ¿Tú qué piensas, gran rey? ¿existe acaso aquella hermosa mujer vista en el sueño?"
El rey respondió:"¡Oh, Bhagavan! No, no existe".
El Bhagavan dijo entonces:" ¡Oh gran rey! ¿Tú qué piensas? ¿Aquel hombre que desea ardientemente a esa hermosa mujer  vista en el sueño, es acaso sensato?"
El rey respondió: ¡Oh Bhagavan! No, no lo es. Si se pregunta por qué no lo es, se puede decir que porque la hermosa mujer vista en el sueño es totalmente inexistente, y no puede ser percibida; pero sin embargo él sigue pensando en gozar con ella, así que ese hombre, al estar privado de ella permanece en el sufrimiento"
El Bhagavan dijo entonces: "¡Oh gran rey!, similarmente, el hombre común, necio e ignorante,al percibir con su ojo las formas, desea vehementemente las formas que le resultan agradables a su mente; al desearlas con vehemencia se apega a ellas; al apegarse a ellas se aferra a ellas; al aferrarse a ellas realiza con cuerpo, habla y mente acciones que son nacidas del apego, del rechazo y de la ignorancia. Esas acciones una vez realizadas, desaparecen. Y habiendo desaparecido, no se encuentran ni en el Este, ni en el Sur, ni se encuentran en el Oeste, ni tampoco en el Norte; no se encuentran arriba, ni tampoco abajo; ni se encuentran en ninguna otra dirección del espacio. Pero tiempo después, en el momento de la muerte, al consumirse el karma de la vida en curso, en el momento en el que desaparece la última consciencia, el karma surge en la mente como la hermosa mujer del sueño en la mente del hombre que se despertó. ¡Oh, gran rey! al desaparecer la última consciencia, surge la primera consciencia que forma parte del nacimiento como un dios, o como un asura, o como un ser humano, o nace en los infiernos, o como un animal, o como un preta (fantasma hambriento). ¡Oh gran rey! inmediatamente después de que desaparezca la primera consciencia, surge el continuo mental correspondiente a ella, en el cual se manifestarán las experiencias de las consecuencias kármicas de las acciones pasadas. ¡Oh gran rey! ningún dharma (Impulso) pasa de este mundo al otro mundo; y sin embargo, la muerte y el nacimiento se manifiestan. ¡Oh gran rey! a la desaparición de la última consciencia, se le llama muerte. Al surgimiento de la primera consciencia se le llama nacimiento. ¡Oh gran rey! en el momento de su desaparición, la consciencia última no va a ningún lugar; en el momento de su surgimiento, la primera consciencia, que forma parte del nacimiento tampoco viene de ningún lugar. Si se pregunta por qué, es porque carece de una existencia intrínseca. ¡Oh gran rey! La consciencia última está vacía de una consciencia última, la muerte está vacía de muerte, la acción está vacía de acción, la primera consciencia está vacía de primera consciencia, el nacimiento está vacío de nacimiento, las acciones se manifiestan sin destruirse. ¡Oh gran rey! inmediatamente después de desaparecer la primera conciencia que forma parte del nacimiento, sin solución de continuidad, surge el continuo mental en el cual se manifestará la experiencia del karma de las acciones pasadas",
Así se expresó el Bhagavan, Después de haber hablado así, el Bienaventurado, el Maestro pronunció estas otras palabras:
Todas las cosas son tan solo nombre,
se encuentran tan solo en el pensamiento;
separado del nombre,
lo que él designa no existe.

Cualquier dharma (impulso) es designado
con un nombre;
pero en el nombre el dharma no existe,
esta es la esencia de todos los dharmas.

La esencia del nombre es la vacuidad del nombre,
el nombre en cuanto a nombre, carece de existencia por sí mismo;
todos los dharmas, carentes de nombres,
han sido designados por medio de nombres.

Siendo todos los dharmas inexistentes,
surgen por completo de la imaginación,
la misma imaginación por la que ellos son imaginados como vacíos,
tampoco existe.

Lo que dice aquel con una visión común:
"el ojo ve la forma"
en este mundo cegado por la ignorancia
es llamado la "verdad que oculta"

El Buda con razón ha enseñado:
"se ve gracias a un agregado"
A esto el Sabio lo ha llamado
"el fundamento para acceder a la Verdad Suprema"

El ojo no ve formas,
la mente no conoce los dharmas,
esta es la verdad suprema
que desconoce el mundo.

Tras hablar así el Bhagavan, Bimbisara, el rey de Magadha, y todos aquellos bodhisattvas, monjes, los dioses, hombres, asuras y todo el mundo, junto con los gandharvas (músicos celestiales) se regocijaron, y alabaron ampliamente las palabras del Bhagavan.

FIN DEL SUTRA

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