domingo, 30 de septiembre de 2012

Sutra de la Perfección de la Sabiduría en 8000 Lineas; Capítulo 9

CAPÍTULO NUEVE: LA ALABANZA.
 
LA SABIDURÍA PERFECTA ES PERFECTAMENTE PURA. (1)
 
Subhuti: Llamarla “Perfección de la Sabiduría”, Oh Señor, eso es meramente darle un nombre. Y lo que a ese nombre corresponde, eso no puede ser agarrado. Uno habla de un “nombre” refiriéndose a una entidad meramente nominal. Incluso esta Perfección de la Sabiduría no puede ser encontrada o agarrada. En la medida en que es una palabra, en esa medida es sabiduría perfecta; en la medida en que es sabiduría perfecta, en esa medida es una palabra. No puede ser encontrada o agarrada ninguna dualidad entre estos dos fenómenos. ¿Por qué razón entonces, Maitreya, el Gran Ser, después de que haya alcanzado la Suprema Iluminación, predicará esta misma Perfección de la Sabiduría, en este mismo pedazo de tierra, con estas mismas palabras?
El Señor: La razón es que Maitreya estará Completamente Iluminado, en cuanto al hecho de que los agregados no son ni permanentes, ni impermanentes; que no están limitados, ni liberados; que son absolutamente puros.
Subhuti: Indudablemente la Perfección de la Sabiduría es perfectamente pura.
El Señor: La sabiduría perfecta es perfectamente pura porque los agregados son puros; y porque su “no producción” es perfectamente pura, y también su “no cese” , su “no Impureza”, y su “no purificación”. Es puro porque el espacio es puro, y porque los agregados son inmaculados, y las fuerzas impuras no pueden cogerlos. La sabiduría perfecta es perfectamente pura porque, como el espacio o un eco, es incompletable, incomunicable, y no ofrece una base para ser aprehendida. Es perfectamente pura porque no está cubierta por ningún fenómeno, mancillado o inmaculado.
 
EFECTOS DE LA SABIDURÍA PERFECTA. (2)
 
Subhuti: Es sin duda una gran ganancia para estos hijos e hijas de una buena familia el que vengan a oír esta Perfección de la Sabiduría. ¡Cuánto más grande sería si la aceptaran, la llevaran en mente, la recitaran, la estudiaran, la difundieran, la enseñaran, la explicaran, y la dominaran! Sus ojos, oídos, nariz, lengua, y cuerpo estarán libres de enfermedad, y sus mentes libres de estupefacción. No morirán de una muerte violenta. Muchos miles de dioses los seguirán  cerca tras ellos. Donde quiera que en el octavo, catorceavo, y quinceavo día del mes, un hijo o una hija de una buena familia enseñe la Perfección de la Sabiduría, allí engendrará una gran cantidad de mérito.
El Señor: Así es, Subhuti. Muchos miles de dioses, Subhuti, seguirán de cerca a ese hijo o hija de una buena familia, y muchos miles de dioses vendrán a dónde esta sabiduría perfecta está siendo enseñada. Deseosos de escuchar el Dharma, todos ellos protegerán al predicador del Dharma que enseña esta Perfección de la Sabiduría. Puesto que la sabiduría perfecta es la cosa más preciosa en el mundo, con sus Dioses, Hombres, y Asuras. Eso también es una razón por la que tal persona generará una gran cantidad de mérito.
Por otro lado, habrá muchos obstáculos para que esta Perfección de la Sabiduría sea escrita, aceptada, mantenida en mente, recitada, estudiada, difundida, explicada y repetida. Pues las cosas muy preciosas provocan mucha hostilidad. Cuanto más excelentes son, mayor es la hostilidad. Pero esto es la cosa más preciosa en el mundo entero, esta Perfección de la Sabiduría, la cual ha sido establecida  y emprendida para el beneficio y la felicidad del mundo, al mostrar que todos los fenómenos no han sido producidos ni destruidos, que no están ni manchados ni purificados. La sabiduría perfecta no se aferra a ningún fenómeno, ni mancha a ningún fenómeno, ni agarra a ningún fenómeno. Pues todos estos fenómenos ni existen, ni son agarrados. Porque no ha sido aprehendida, la Perfección de la Sabiduría es inmaculada. “Estar libre de manchas”, eso es lo mismo que sabiduría perfecta. Y es porque los agregados están libres de manchas, por lo que la sabiduría perfecta no tiene ninguna mácula. Un Bodhisattva discurre en la sabiduría perfecta si él ni tan siquiera percibe eso. Además, esta Perfección de la Sabiduría no entra, o se coloca dentro de ningún fenómeno; ella no revela o define a ningún fenómeno; ella no trae o se lleva a ningún fenómeno.
 
EL SEGUNDO GIRO DE LA RUEDA DEL DHARMA. (3)
 
En aquel momento, una gran cantidad de miles de Dioses del reino Intermedio dieron grandes voces, con gritos de alegría, agitaron sus vestimentas, y dijeron: “¡Nosotros ahora vemos el Segundo Giro de la Rueda del Dharma teniendo lugar en Jambudvipa!”
El Señor: Esto, Subhuti, no es el Segundo Giro de la Rueda del Dharma. Ningún fenómeno puede ser girado hacia adelante, o hacia atrás. Esto es la Perfección de la Sabiduría de un Bodhisattva.
Subhuti: Grande es esta perfección de un Bodhisattva que, no apegado a ningún fenómeno, quiere conocer la Completa Iluminación, y que aún no está iluminado con respecto a ningún fenómeno; o que girará la Rueda de la Doctrina, y sin embargo no mostrará ninguna doctrina. Pues aquí no hay ningún fenómeno que coger, ni es indicado ningún fenómeno, ni ningún fenómeno seguirá a ningún fenómeno. Pues de forma absoluta, la reproducción es extraña a todos los fenómenos. Ni tampoco ningún fenómeno se transformará en otro fenómeno. Puesto que desde el mismo principio, todos los fenómenos no han sido producidos, puesto que su naturaleza esencial es aislada.
El Señor: Así es, Subhuti. Pues la vacuidad no avanza ni retrocede; y eso también es bueno para la Carencia de Signos, y para la Carencia de Deseos. El demostrar esto, es mostrar todas las Doctrinas. Pero nadie lo ha manifestado, nadie lo ha oído, nadie lo ha recibido, y nadie lo ha realizado en el pasado, presente, o futuro. Ni debido a esta demostración de la Doctrina nadie v a al Nirvana. Ni por esta demostración de la Doctrina nadie ha sido nunca hecho merecedor de regalos.
 
LAS FORMAS Y CUALIDADES DE LA SABIDURÍA PERFECTA (4)
 
Subhuti: Esta es una perfección que no es, porque el espacio no es algo que sea. Esta es una perfección que iguala a lo inigualable, porque todos los fenómenos no son aprehendidos. Esta es una perfección aislada, en cuanto a su absoluta vacuidad. Esta perfección no puede ser destruida, porque todos los fenómenos son “no aprehendidos”. Esta es una perfección sin rastro, porque ambos, cuerpo y mente, están ausentes. Esta es una perfección que no tiene existencia propia, porque ni viene, ni va. Esta perfección es inexpresable, porque todos los fenómenos no son discriminados. Esta perfección no tiene nombre, porque todos los agregados no son aprehendidos. Esta perfección no se marcha, porque ningún fenómeno se marcha nunca. Uno no puede ser parte de esta perfección, porque ningún fenómeno puede ser agarrado. Esta perfección es inexhaustible, pues está vinculada al inexhaustible Dharma. Esta perfección no tiene génesis, porque ningún fenómeno ha llegado a surgir realmente. Esta es una perfección que no hace nada, porque ningún agente actor puede ser aprehendido. Esta perfección no genera nada, porque todos los fenómenos carecen de un yo. Esta perfección no muere, porque no hay un origen del morir y del renacer. Esta perfección no disciplina, porque los periodos de pasado, presente, y futuro, no son aprehendidos. Esta es la perfección de un sueño, de un eco, de una imagen reflejada, de un espejismo, de una ilusión, porque informa de una no producción. Esta perfección está libre de impurezas, porque la codicia, el odio, y la ignorancia no tienen existencia propia. Esta perfección conoce la “no purificación”, porque no puede ser aprehendido ningún receptáculo (que pudiera ser purificado). Esta perfección es inmaculada, porque el espacio es inmaculado. Esta perfección está libre de impedimento, al ser espontáneamente presente y estar más allá de todas las actitudes mentales hacia los fenómenos. Esta perfección no tiene actitudes mentales, porque es imperturbable. Esta perfección es inquebrantable, como consecuencia de la estabilidad del Reino de la Verdad (Dharmata). Esta perfección ha rechazado la codicia, porque no hay falsedad en los fenómenos. Esta perfección no surge, porque no hay discriminación en los fenómenos. Esta perfección es quietud, porque ningún signo es aprehendido en los fenómenos. Esta perfección carece de faltas, como perfección de todas las virtudes. Esta perfección es pura, porque la imaginación es algo que no está. En esta perfección no se encuentra a ningún ser vivo, debido al límite de la realidad. Esta perfección es ilimitada, porque la manifestación de todos los fenómenos no surge. Esta perfección no sigue tras la dualidad de los opuestos, porque no se establece en ninguno de los fenómenos. Esta perfección es no diferenciada, porque todos los fenómenos lo son. Esta perfección es intachable, porque está libre de todo anhelo por la joya de los Discípulos y Pratyekabuddhas. La Perfección de la Sabiduría es indiscriminada, porque esta es la identidad básica de todos lo que es discriminado. La Perfección de la Sabiduría es infinita, porque la naturaleza de la Verdad es ilimitada. La Perfección de la Sabiduría carece de apego, porque no hay apego a ningún fenómeno. La Perfección de la Sabiduría es incondicionada, porque todos los fenómenos son impermanentes, y una mera indicación de tal como esto es. La Perfección de la Sabiduría es como el espacio, porque la naturaleza de todos los fenómenos es idéntica a la impermanencia. La Perfección de la Sabiduría es vacía, porque ningún fenómeno puede ser aprehendido. La Perfección de la Sabiduría carece de un yo, porque no se establece en ningún fenómeno. La Perfección de la Sabiduría carece de marcas, porque aquí no hay reproducción de los fenómenos.
Esta es una perfección toda vacuidad, porque es infinita e ilimitada. Esta es una perfección de las Alas de la Iluminación, tales como los Fundamentos de la Atención Mental, etc, porque no pueden ser aprehendidos. Esta es una perfección de la Vacuidad, de la Carencia de Signos, de la Carencia de Deseos; porque las Tres Puertas de la Liberación no pueden ser aprehendidas.
Es una perfección de la Ocho Liberaciones, porque ellas no pueden ser aprehendidas. Esta es una perfección de los nueve estados sucesivos, porque el primer estado de concentración, etc, no pueden ser aprehendidos. Esta es una perfección de las Cuatro Verdades, porque la enfermedad, la vejez, y la muerte, no pueden ser aprehendidos. Esta es una perfección de la diez perfecciones, porque la generosidad, etc, no pueden ser aprehendidas. Esta es la perfección de los Diez Poderes, porque no pueden ser destruidos. Esta es una perfección de los Cuatro Fundamentos de la Intrepidez, porque absolutamente no puede ser acobardada. Esta es una perfección de la sabiduría analítica, porque no está obstruida cuando no está apegada a la omnisciencia. Esta es una perfección de todos los fenómenos especiales de los Budas, porque ellos han trascendido todo lo mesurable. Esta es una perfección de la Talidad del Tathagata, porque no hay falsedad en todos y cada uno de los fenómenos. Esta es la perfección de que nada tiene Existencia propia, porque todos los fenómenos carecen de existencia propia. Esta Perfección de la Sabiduría es una perfección de la Sabiduría de la Omnisciencia, porque comprende todos las formas de existencia de todos los fenómenos.
 
 
 
Trad. al castellano por el ignorante y falto de devoción upasaka Losang Gyatso.
 
 

jueves, 27 de septiembre de 2012

Sutra de la Perfección de la Sabiduría en 8000 Lineas. Capítulo 8

CAPÍTULO OCHO: LA PUREZA.

 

LA PROFUNDIDAD Y PUREZA DE LA SABIDURÍA PERFECTA (1)

 

Subhuti: Es difícil obtener confianza en la Perfección de la Sabiduría si uno carece de práctica, si carece de raíces de virtud, y si está en las manos de un mal amigo.

El Señor: Así es, Subhuti. Es difícil obtener confianza en la Perfección de la Sabiduría si uno carece de práctica, si tiene tan solo raíces de virtud diminutas, si es poco inteligente, si ha aprendido poco, si tiene un tipo inferior de sabiduría, si confía en malos amigos, si no ansía aprender, si no desea hacer preguntas, y si carece de práctica en los fenómenos virtuosos.

Subhuti: Entonces, ¿Cómo es de profunda esta Perfección de la Sabiduría, ya que es tan difícil el tener confianza en ella?

El Señor: La forma no está limitada ni liberada, porque la forma no tiene existencia propia. El punto de partida previo de un proceso material (forma) no está limitado ni liberado, porque el punto de partida de un proceso material carece de existencia propia. El final de un proceso material no tiene existencia propia, porque el hecho de estar presente no es una parte de la existencia propia de un fenómeno presente. Y así sucede con todos los demás agregados.

Subhuti: Es difícil, es extremadamente difícil obtener confianza en la Perfección de la Sabiduría, si uno carece de práctica, si no ha plantado raíces de virtud, si está en las manos de un mal amigo, si está bajo la influencia de Mara, si es perezoso, si se esfuerza poco, si no tiene atención mental plena, o si es estúpido.

El Señor: Así es Subhuti. Porque la pureza de la forma es idéntica  a la pureza del fruto, y la pureza del fruto es idéntica a la pureza de la forma. Siendo así, que la pureza de la forma y la pureza del fruto no son dos, ni están divididas, ni están separadas y rotas, ni están separadas y cortadas. Es así que la pureza de la forma viene de la pureza del fruto, y la pureza del fruto viene de la pureza de la forma. Y la misma identidad existe entre la pureza de la forma y la pureza de la omnisciencia. Lo mismo se aplica para los demás agregados.

Shariputra: ¡Profunda, Oh Señor, es la Perfección de la Sabiduría!

El Señor: Por la pureza.

Shariputra: La Perfección de la Sabiduría es una fuente de iluminación.

El Señor: Por la pureza.

Shariputra: La sabiduría perfecta es una luz.

El Señor: Por la pureza.

Shariputra: La sabiduría perfecta no está sujeta a renacimiento.

El Señor: Por la pureza.

Shariputra: La sabiduría perfecta está libre de impurezas.

El Señor: Por la pureza.

Shariputra: En la sabiduría perfecta no hay logro ni reunión.

El Señor: Por la pureza.

Shariputra: La sabiduría perfecta no se reproduce.

El Señor: Por la pureza.

Shariputra: No hay renacimiento en absoluto de la sabiduría perfecta, ni en el Reino del Deseo, ni en el Reino de la Forma, ni en el Reino de la No Forma.

El Señor: Por la pureza.

Shariputra: La sabiduría perfecta ni conoce, ni percibe.

El Señor: Por la pureza.

Shariputra: ¿Qué hace entonces que la sabiduría perfecta ni conozca, ni perciba?

El Señor: La forma y los demás agregados. ¿Y por qué? Por la pureza.

Shariputra: La sabiduría perfecta ni ayuda, ni impide la omnisciencia.

El Señor: Por la pureza.

Shariputra: La sabiduría perfecta ni alcanza, ni abandona ningún fenómeno.

El Señor: Por la pureza.

Subhuti: La pureza de la forma, etc, es debida a la pureza de ego.

El Señor: Porque es absolutamente pura.

Subhuti: La pureza del fruto, y la pureza de la omnisciencia, son debidas a la pureza de ego.

El Señor: Debido a su absoluta pureza.

Subhuti: La ausencia de logro y de la reunión, es debida  a la pureza de ego.

El Señor: Debido a su absoluta pureza.

Subhuti: Lo ilimitado de la forma, etc, es debido a lo ilimitado del ego.

El Señor: Debido a su absoluta pureza.

Subhuti: El Bodhisattva que lo entiende así, tiene sabiduría perfecta.

El Señor: Debido a su absoluta pureza.

Subhuti: Además, esta Perfección de la Sabiduría no se establece en esta orilla, ni en la orilla del más allá, ni a través de ambas.

El Señor: Debido a su absoluta pureza.

Subhuti: Un Bodhisattva que trate a esa (penetración) como un objeto de percepción, por ello, se separará de esta Perfección de la Sabiduría; y está muy alejado de ella.

 

APEGOS (2)

 

El Señor: Bien dicho, Subhuti. Pues también los nombres y los signos son fuentes de apego.

Subhuti: Es maravilloso, Oh Señor, ver la amplitud en la que esta Perfección de la Sabiduría ha sido bien enseñada, bien explicada, bien aceptada. El Señor incluso anuncia estas fuentes de apego.

Shariputra: ¿Cuáles, Subhuti, son estos apegos?

Subhuti: Es un apego si uno percibe que los agregados son vacíos, que los fenómenos pasados son fenómenos pasados, que los fenómenos futuros son fenómenos futuros, que los fenómenos del presente son fenómenos del presente. Es un apego si uno concibe la noción de que alguien que pertenece al Vehículo de los Bodhisattvas genera un montón de mérito tan grande, cuando se produce su primer pensamiento de la Iluminación (Bodhicitta).

Sakra: ¿De qué manera, Subhuti, llega a ser el pensamiento de la iluminación una fuente de apego?

Subhuti: Uno llega a estar apegado, cuando uno percibe este pensamiento de la iluminación como: “este es el primer pensamiento de la iluminación”, y si uno lo transforma en Completa Iluminación mientras es consciente de que hace eso. Pues es completamente imposible transformar la naturaleza primordial esencial del pensamiento. Por lo tanto, uno debería de estar de  acuerdo con la verdadera realidad cuando hace a los otros ver lo más elevado, y despierta en ellos el deseo de alcanzar la Suprema Iluminación. De esta forma, uno no se consume, y la forma en la que uno despierta en los demás el deseo de alcanzar lo más elevado, tiene la aprobación de los Budas. Y uno tiene éxito al abandonar todos estos objetos de apego.

El Señor: Bien dicho, Subhuti. Tú haces a los Bodhisattvas conscientes de estos objetos de apego. Yo ahora voy a mostrar otros apegos, más sutiles. Escucha bien, y pon buena atención. Te los enseñaré.

“Bien dicho, Oh Señor”- Y el Venerable Subhuti escuchó en silencio.

El Señor: Aquí, Subhuti, un hijo o una hija de una buena familia, lleno de fe, presta atención al Tathagata a través de un signo. Pero tantos signos, tantos apegos. Pues de los signos viene el apego.

Es así, que él es consciente de que se regocija en todos los fenómenos sin efusiones de los Budas y Señores del pasado, futuro, y presente; y que tras regocijarse, él transforma en Completa Iluminación las raíces de virtud que están asociadas con su acción de júbilo. Sin embargo, como una cuestión de hecho, la verdadera naturaleza de los fenómenos no es pasado, futuro, o presente; ella está situada completamente fuera de los tres periodos de tiempo; y por esa razón, no puede ser posible que sea convertida, no puede ser tratada como un signo, o como un soporte objetivo, y no puede ser visto, ni oído, ni sentido, ni conocido.

 

NO APEGO (3)

 

Subhuti: Profunda es la naturaleza primordial esencial de todos los fenómenos.

El Señor: Porque es aislada.

Subhuti: Profunda es la naturaleza esencial de la sabiduría perfecta.

El Señor: Porque su naturaleza esencial es pura y aislada, por lo tanto, la Perfección de la Sabiduría tiene una naturaleza esencialmente profunda.

Subhuti: La naturaleza esencial de la sabiduría perfecta es aislada. Yo rindo homenaje a la Perfección de la Sabiduría.

El Señor: También todos los fenómenos en su naturaleza esencial son aislados. Y el aislamiento de la naturaleza esencial de todos los fenómenos es idéntica a la Perfección de la Sabiduría. Pues el Tathagata ha conocido completamente a todos los fenómenos como no fabricados.

Subhuti: ¿Por lo tanto todos los fenómenos tienen el carácter de no haber sido completamente conocidos por el Tathagata?

El Señor: Es solo a través de su naturaleza esencial que los fenómenos no son un “algo”. Su naturaleza es “no naturaleza”, y su “no naturaleza” es su naturaleza. Porque todos los fenómenos tienen una marca, el carecer de marca. Es por esta razón que todos los fenómenos tienen el carácter de no haber sido completamente conocidos por el Tathagata. Pues no hay dos naturalezas de la Verdad, sino que la naturaleza de los fenómenos es tan solo una, y la naturaleza de todos los fenómenos es su “no naturaleza”; y su “no naturaleza” es su naturaleza.

Así es como todos estos objetos de apego son abandonados.

Subhuti: Profunda, Oh Señor, es la Perfección de la Sabiduría.

El Señor: A través de una profundidad que es como la del espacio.

Subhuti: Difícil de entender, Oh Señor, es la Perfección de la Sabiduría.

El Señor: Porque nada es completamente conocido por el Iluminado.

Subhuti: Impensable es, Oh Señor, la Perfección de la Sabiduría.

El Señor: Porque la Perfección de la Sabiduría no es algo que el pensamiento debe de conocer, o a lo que ese pensamiento tenga acceso.

Subhuti: La Perfección de la Sabiduría no es algo fabricado, Oh Señor.

El Señor: Porque ningún hacedor puede ser aprehendido.

Subhuti: Entonces, bajo estas circunstancias, ¿Cómo debería un Bodhisattva de discurrir en la sabiduría perfecta?

El Señor: Un Bodhisattva discurre en la sabiduría perfecta, si mientras discurre, él no discurre en los agregados; o si él no discurre en la convicción de que los agregados son impermanentes, o de que son vacíos, o de que no son ni con defectos ni completos. Y si él ni tan siquiera discurre en la convicción de que la forma no es la defectuosidad o la plenitud de la forma, y es lo mismo para con el resto de los agregados, entonces él discurre en la sabiduría perfecta.

Subhuti: ¡Es maravilloso, Oh Señor, qué bien han sido explicadas las razones del apego y del no apego de los Bodhisattvas!

El Señor: Uno discurre en la sabiduría perfecta si uno no discurre en la idea de que la forma es con apego, o sin apego. Y lo mismo que sucede con la forma, así es con los demás agregados, para los órganos de los sentidos, etc, para la sensación nacida del contacto del ojo; así es para los elementos; para las Seis Perfecciones, para las Treinta y Siete Alas de la Iluminación, los poderes, los Cuatro Fundamentos de la Intrepidez, el conocimiento analítico, las dieciocho características específicas de un Buda; y los frutos de la vida santa, desde el fruto del que Entra en la Corriente, a la omnisciencia. Pues la omnisciencia es no apegada, es ni limitada ni liberada, y no hay nada que haya surgido sobre ella. Es así, Subhuti, como los Bodhisattvas deberían de discurrir en la sabiduría perfecta, superando completamente todos los apegos.

 

COMO EL ESPACIO, O UN ECO. (4)

 

Subhuti: ¡Es maravilloso, Oh Señor, qué profundo es este Dharma, quiero decir, la Perfección de la Sabiduría! El mostrarlo no lo disminuye o aumenta. El no mostrarlo tampoco lo disminuye o aumenta.

El Señor: Bien dicho, Subhuti. Es como si un Tathagata  debiera de hablar durante toda su vida alabando al espacio, sin que por ello el volumen del espacio se incremente; y si él no estuviera hablando o alabándolo, el espacio tampoco disminuiría. O es como un hombre ilusorio. La alabanza no lo penetra o lo gana. Cuando no hay alabanza tampoco está afectado o frustrado. Así es la verdadera naturaleza de los fenómenos, tanto que sean mostrados como no.

Subhuti: Alguien que hace lo que es difícil de hacer es el Bodhisattva que, mientras discurre en la sabiduría perfecta, no se descorazona ni se alegra; quien persiste en hacer esfuerzos en ella, y no abandona. El desarrollo de la sabiduría perfecta es como el desarrollo del espacio. Debería de rendírseles homenaje a los Bodhisattvas que están armados con esta armadura. Pues ellos quieren estar armados con el espacio cuando, para beneficio de los seres, ellos ponen la armadura. Un Bodhisattva está armado con la gran armadura, un Bodhisattva es un héroe, cuando quiere se armado con una armadura, y alcanza la Completa Iluminación para beneficio de los seres que son como el espacio, que son como el Reino de la Verdad. El es alguien que quiere liberar al espacio, él es alguien que ha conseguido la armadura de la gran Perfección del Esfuerzo, ese Bodhisattva está armado con la gran armadura para beneficio de los seres, que son como el espacio, que son como el Reino de la Verdad.

Entonces, un cierto monje saludó al Señor con las manos juntas, y le dijo al Señor: “¡Rindo homenaje, Oh Señor, a la Perfección de la Sabiduría! Pues no produce ni cesa ningún fenómeno!”

Sakra: Si alguien, santo Subhuti, hiciera esfuerzos en esta Perfección de la Sabiduría, ¿Cuáles serían sus esfuerzos?

Subhuti: El debería de hacer esfuerzos respecto al espacio. Y el haría que sus esfuerzos fueran una mera vacuidad si es que él decidiera entrenarse en la sabiduría perfecta, o trabajar en ella.

Sakra: ¡Por favor, Oh Señor, ordéname dar cobijo, defender, y proteger a ese hijo o hija de una buena familia que lleva en mente esta Perfección de la Sabiduría!

Subhuti: Sakra, ¿Puedes ver ese fenómeno al que tú piensas cobijar, defender, y proteger?

Sakra: No, santo Subhuti.

Subhuti: Así, cuando un Bodhisattva permanece en la Perfección de la Sabiduría, tal como ha sido expuesto, entonces ella será su refugio, defensa, y protección. Por otro lado, cuando él está carente de sabiduría perfecta, entonces aquellos hombres y fantasmas que buscan entrar, podrán entrar en él. No obstante, uno quisiera dar cobijo, defensa, y protección a un Bodhisattva que discurre en la sabiduría perfecta. ¿Qué piensas, Kausika, eres capaz de dar cobijo, defensa, y protección a un eco?

Sakra: No, santo Subhuti.

Subhuti: De esta forma, un Bodhisattva el cual discurra y medite en la sabiduría perfecta, comprende que todos los fenómenos son como un eco. El no piensa en ellos, no los examina, no los identifica, o los percibe; y él sabe que todos esos fenómenos no existen, que su realidad no aparece, que no pueden ser encontrados, que no pueden ser capturados. Si el medita así, el discurre en la sabiduría perfecta.

 

CONCLUSIÓN. (5)

 

Acto seguido, a través del poder del Buda, los Cuatro Grandes Reyes en el gran macrocosmos de tercer orden, y todos los Sakras, los Jefes de los Dioses, y todos los Grandes Dioses Brahma, y Sahapati, el Gran Brahma, todos ellos vinieron a donde estaba el Señor. Ellos saludaron respetuosamente a los pies del Señor con sus cabezas, caminaron tres veces alrededor del Señor, y se sentaron a un lado. A través del poder del Buda, y de sus poderes milagrosos, sus mentes fueron impresionadas por la visión de mil Budas.

Con estas palabras, pronunciadas por monjes como Subhuti, etc, ha sido expuesta la Perfección de la Sabiduría.

Referente a ella, los Sakras, los Jefes de los Dioses, hicieron preguntas y contra preguntas. En este pedazo de tierra ha sido enseñada la Perfección de la Sabiduría. También Maitreya, el Bodhisattva, el Gran Ser, después de que haya alcanzado la Suprema Iluminación, enseñará en este pedazo de tierra la misma Perfección de la Sabiduría.

 

 

Trad. al castellano por el ignorante y falto de devoción upasaka Losang Gyatso.

 

 

 

domingo, 23 de septiembre de 2012

Sutra de la Perfección de la Sabiduría en 8000 Lineas, Capítulo 7 Los Infiernos

CAPÍTULO SIETE: LOS INFIERNOS.
 
HIMNO A LA PERFECCIÓN DE LA SABIDURÍA. (1)
 
Shariputra: La Perfección de la Sabiduría, Oh Señor, es el logro del conocimiento de la omnisciencia. La Perfección de la Sabiduría es ese estado de omnisciencia.
El Señor: Así es, Shariputra, tal como tú dices.
Shariputra: La Perfección de la Sabiduría da luz, Oh Señor. ¡Yo rindo homenaje a la Perfección de la Sabiduría! Ella es merecedora de homenaje. Ella es inmaculada, el mundo entero no puede mancillarla. Ella es una fuente de luz, y elimina la oscuridad de todos quienes habitan en los Tres Reinos; y lleva lejos la oscura ceguera ocasionada por las impurezas y los puntos de vista equivocados. En ella podemos encontrar protección. Sus obras son las más excelentes. Ella nos hace buscar la seguridad de las alas de la Iluminación. Ella trae luz al ciego, trae luz de forma que todos los miedos y angustias puedan ser abandonados. Ella ha logrado los cinco ojos, y muestra el sendero a todos los seres. Ella misma es un órgano de visión. Ella dispersa la penumbra y la oscuridad de los engaños. Ella no hace nada respecto a todos los fenómenos. Ella guía al sendero a aquellos que se han extraviado por malos caminos. Ella es idéntica a la omnisciencia. Ella nunca percibe ningún fenómeno, porque ella ha abandonado los residuos relacionados con ambos tipos de envoltura, los producidos por las impurezas y los producidos por lo conocible. Ella no cesa a ningún fenómeno. Siendo ella misma no cesada y no producida, es la Perfección de la Sabiduría. Ella es la Madre de los Bodhisattvas, a cuenta de la propia marca de la vacuidad. Como donante de la joya de todos los fenómenos de los Budas, ella otorga los Diez Poderes (de un Buda). Ella no puede ser destruida. Ella protege a quien está sin protección, con la ayuda de los Cuatro Fundamentos de la Intrepidez. Ella es el antídoto al nacimiento y la muerte. Ella tiene un claro conocimiento de la verdadera naturaleza de todos los fenómenos, pues no se aparta de ella. La Perfección de la Sabiduría de los Budas, los Señores pone en marcha la Rueda del Dharma.
 
EL PREDOMINIO DE LA PERFECCIÓN DE LA SABIDURÍA SOBRE LAS DEMÁS PERFECCIONES (2)
 
¿Cómo debería un Bodhisattva de permanecer en la Perfección de la Sabiduría, cómo prestarle atención y rendirle homenaje?
El Señor: La Perfección de la Sabiduría, en todas sus formas, debería de ser tratada como si fuera el propio Maestro.
Entonces Sakra le preguntó a Shariputra: “¿De dónde, y por qué razón ha surgido esta pregunta del santo Shariputra?
Shariputra: Surge porque yo oí que se dijo: “Un Bodhisattva que, sostenido por la Perfección de la Sabiduría y de la destreza en los medios, transforma en omnisciencia el trabajo meritorio basado en el júbilo, sobrepasa todo el meritorio trabajo basado en la generosidad, la moralidad, la paciencia, el esfuerzo entusiasta, y la concentración de todos los Bodhisattvas que perciben una base.” Solo es la Perfección de la Sabiduría la que dirige a las cinco perfecciones restantes en su ascenso en el sendero hacia la omnisciencia. Lo mismo que, Kausika, las personas nacidas ciegas, sean cien, o mil, o cien mil de ellas, no pueden ir sin un guía a lo largo del sendero, y llegar a una aldea, pueblo, o ciudad; de la misma forma, la Generosidad, la Moralidad, la Paciencia, el Esfuerzo entusiasta, y la Concentración  no pueden ser llamadas “perfecciones” por sí mismas, pues sin la Perfección de la Sabiduría son como si hubieran nacido ciegas, sin su guía, incapaces de ascender por el Sendero a la Omnisciencia, y menos aún pueden ellas alcanzar la omnisciencia. Sin embargo, cuando la Generosidad, la Moralidad, la Paciencia, el Esfuerzo, y la Concentración son conseguidas por la Perfección de la Sabiduría, entonces a ellas se les llama “perfecciones”, pues entonces estas cinco perfecciones adquieren un órgano de visión que les permite ascender en el Sendero a la Omnisciencia, y alcanzar la omnisciencia.
 
NADA ES LOGRADO POR LA SABIDURÍA PERFECTA. (3)
 
Shariputra le dijo al Señor: “¿Cómo debería un Bodhisattva de consumar la Perfección de la Sabiduría?”
El Señor: El debería de ver la no consumación de la forma, etc. La no consumación de los cinco agregados, eso es llamado la “consumación” de la Perfección de la Sabiduría. De esta forma, puesto que nada se efectúa, la consumación de los cinco agregados es llamada la “consumación de la Perfección de la Sabiduría”.
Shariputra: Cuándo la Perfección de la Sabiduría ha sido consumada por dicha consumación, ¿Qué tipo de fenómeno se obtiene?
El Señor: Cuando la Perfección de la Sabiduría es consumada de esta forma, no genera ningún fenómeno; como consecuencia de este hecho, ella llega ser llamada “Perfección de la Sabiduría”.
Sakra: Oh, Señor ¿Esta Perfección de la Sabiduría ni siquiera procura la omnisciencia?
El Señor: No la procura como si fuera una base, o un proceso mental, o un acto de volición.
Sakra: ¿Entonces, cómo procura?
El Señor: En la medida en que no procura, así procura.
Sakra: Es maravilloso, Oh Señor, ver hasta qué punto esta Perfección de la Sabiduría  ni produce, ni cesa ningún fenómeno. Pues el propósito de la no producción y el no cese de todos los fenómenos tiene estando establecida a la Perfección de la Sabiduría, y sin embargo sin que esté realmente presente.
Subhuti: Si un Bodhisattva también percibiera eso, entonces él estará lejos de esta Perfección de la Sabiduría, y la trata como algo sin valor e insignificante, y fracasa al obrar en ella.
El Señor: Esto es completamente cierto. Pues dónde la Perfección de la Sabiduría está alumbrando, allí la forma no llega a iluminar, ni tampoco los otros agregados, ni los frutos de la vida santa, hasta llegar a la Budeidad.
Subhuti: ¡Esta Perfección de la Sabiduría es una gran perfección, Oh Señor!
 
POR QUÉ ES GRANDE LA PERFECCIÓN DE LA SABIDURÍA. (4)
 
El Señor: ¿Qué piensas, Subhuti, de qué manera es esta Perfección de la Sabiduría una gran perfección?
Subhuti: Ella no hace a la forma, etc, mayor o más pequeña; y ella no reúne o dispersa a la forma, etc. Ella tampoco fortalece o debilita los poderes de un Tathagata, ni los reúne o dispersa. Ella ni siquiera hace a esa omnisciencia mayor o menor, ni la reúne o la dispersa. Pues la omnisciencia es no reunida (no acumulada) y no dispersa (no perturbada). Si el Bodhisattva percibe esto así, entonces él no discurre en la Perfección de la Sabiduría, y mucho menos si él forma la noción: “De esta forma, yo, dotado con la sabiduría de la omnisciencia, mostraré el Dharma a los seres; así yo llevaré a aquellos seres al Nirvana final”. Pues esta aprehensión de los seres como una base existente cuando él dice: “Yo llevaré a aquellos seres al Nirvana final”, no puede ser un resultado de la Perfección de la Sabiduría. Esto sería sin duda una gran base de aprehensión por su parte. Pues la ausencia de existencia inherente en los seres, debería de ser conocida como perteneciente a la auténtica esencia de la Perfección de la Sabiduría. Uno debería de saber que la Perfección de la Sabiduría carece de existencia inherente porque los seres carecen de existencia inherente; que la Perfección de la Sabiduría no es imaginable puesto que los seres no son imaginables; que la Perfección de la Sabiduría tiene una naturaleza indestructible porque los seres la tienen; que la Perfección de la Sabiduría, tomada como realmente es, no experimenta el proceso que lleva a la Iluminación porque los seres, tal como realmente son, no experimentan ese proceso; que la forma en la que un Tathagata llega a la plena posesión de sus poderes debería de ser entendida tras la forma en la que los seres llegan a la completa posesión de su poder.
Es de esta forma, que la Perfección de la Sabiduría es una gran perfección.
 
CAUSAS DEL CREER EN LA PERFECCIÓN DE LA SABIDURÍA. (5)
 
Shariputra: Los Bodhisattvas que han renacido aquí, y que aquí creerán resueltamente en esta Perfección de la Sabiduría, sin excitación, duda, o estupefacción, ¿Dónde han perecido, y durante cuánto tiempo han practicado; ellos, que seguirán la doctrina de esta Perfección de la Sabiduría, que entienden su significado y que instruyen a otros en ambos, en el método que muestra el significado, y en el método que muestra la doctrina?
El Señor: Uno debería de saber que semejante Bodhisattva ha renacido aquí después de que él ha perecido en otros sistemas de mundos, donde él ha honrado y preguntado a los Budas, los Señores. Cualquier Bodhisattva que, después de  que ha perecido en otros sistemas de mundos donde él ha honrado y preguntado a los Budas, los Señores, y ha renacido aquí, cuando él oye que está siendo enseñada esta profunda Perfección de la Sabiduría, debería de identificar a esta Perfección de la Sabiduría con el Maestro, y estar convencido de que está cara a cara con el Maestro, que él ha visto al Maestro.
Cuando la Perfección de la Sabiduría está siendo enseñada, él escucha atentamente, le muestra respeto antes de oírla, y no acorta la historia. Tal Bodhisattva debería de ser conocido como alguien que ha practicado durante mucho tiempo, que ha honrado a muchos Budas.
Subhuti: ¿Es posible para todos el oír la Perfección de la Sabiduría, distinguirla y considerarla, hacer afirmaciones y reflexionar sobre ella? ¿Puede uno explicar, o aprender, que debido ciertos atributos, indicios, o signos esta es la Perfección de la Sabiduría, o que allí está la Perfección de la Sabiduría?
El Señor: Indudablemente no, Subhuti. Esta Perfección de la Sabiduría no puede ser expuesta, o aprendida, o distinguida, o considerada, o afirmada, o reflexionada por medio de los agregados, o por medio de los elementos, o por medio de los sentidos. Esto es una consecuencia del hecho de que todos los fenómenos son aislados, absolutamente aislados. Ni la Perfección de la Sabiduría puede ser entendida de otra manera que a través de los agregados, elementos, o los sentidos. Pues los verdaderos agregados, elementos, y sentidos, son vacíos, aislados y calmadamente quietos. Así es que la Perfección de la Sabiduría, y los agregados, elementos y sentidos no son dos, no están divididos. Como un resultado de su vacuidad, aislamiento, y quietud, ellos no pueden ser aprehendidos. La falta de aprehensión en todos los fenómenos, eso es llamado “sabiduría perfecta”. Dónde no hay percepción, nominación, concepción, o expresión convencional, allí uno habla de “Perfección de la Sabiduría”.
Subhuti: Ese Bodhisattva, como alguien que ha practicado durante mucho tiempo, ¿Debería de ser conocido como alguien que hace esfuerzos en esta profunda Perfección de la Sabiduría?
El Señor: Uno debería de hacer una distinción en esto, debido a las desiguales dotes de los diferentes Bodhisattvas.
 
LAS CAUSAS Y CONSECUENCIAS DEL NO CREER. (6)
 
Es perfectamente posible que algunos Bodhisattvas, aunque hayan visto a muchos cientos, muchos miles, muchos cientos de miles de Budas, y hayan llevado una vida santa en su presencia, sin embargo puedan no tener fe en la Perfección de la Sabiduría. La razón es que en el pasado ellos no han tenido respeto por esta profunda Perfección de la Sabiduría, cuando en presencia de aquellos Budas y Señores, fue enseñada. Porque ellos carecieron de respeto hacia ella, ellos no tienen el deseo de aprender más acerca de ella, no la honraron, no quisieron hacer preguntas, y carecieron de fe. Al carecer de fe, acto seguido ellos se salieron de las asambleas. Es porque en el pasado ellos han producido, acumulado, apilado, y reunido karma que conduce a la ruina del Dharma por lo que también en el presente ellos se marchan cuando esta profunda Perfección de la Sabiduría está siendo enseñada. Debido a la falta de respeto carente fe, y de una creencia firme en la Perfección de la Sabiduría, ellos no tienen armonía en sus cuerpos ni en sus pensamientos. Carentes de armonía, ellos no conocen, ven, reconocen, o hacen conocer esta Perfección de la Sabiduría. Primero ellos no creen, y entonces ellos no escuchan; entonces ellos no ven; entonces ellos no la reconocen, y de este modo ellos producen, acumulan, apilan, y reúnen karma que conduce a la ruina del Dharma.
Esto como retribución traerá karma que conduce a la debilidad en la sabiduría. Esto como retribución los hará rechazar, no aceptar, e injuriar a esta Perfección de la Sabiduría cuando está siendo enseñada, y no habiéndola aceptado, ellos saldrán. Pero por no aceptar esta Perfección de la Sabiduría, ellos rechazan la omnisciencia de los Budas y Señores del pasado, futuro, y presente. No contentos con haber viciado sus propias continuidades, como si estuvieran completamente en llamas, ellos desalentarán, disuadirán, y también apartarán a otros- personas de escasa inteligencia, con poca sabiduría, poco mérito, y pocas raíces de virtud; dotados con poca fe, afecto, serenidad, y deseo de hacer; principiantes, esencialmente no cualificados- intentando quitarles incluso esa poca fe, afecto, serenidad, y deseo de hacer. Ellos dirán que uno no debiera de entrenarse en ella; ellos declararán que no es la palabra de Buda. Ellos primero vician y apartan de ella a sus propias comunidades, y después a las de los otros. De este modo calumniarán la Perfección de la Sabiduría.
Calumniar la Perfección de la Sabiduría significa calumniar la omnisciencia, y con ella a los Budas del pasado, futuro, y presente. Ellos serán apartados de la presencia de los Budas y Señores, privados del Dharma, expulsados de la Sangha. En todas y cada una de sus formas, ellos serán excluidos de las Tres Joyas. Sus actividades cercenarán el bienestar y la felicidad de los seres, y de ellas acumularán karma que los conduce a los grandes infiernos. Porque han generado estas formaciones kármicas, ellos renacerán en los grandes infiernos, durante muchos cientos de años, etc, hasta: durante muchos cientos de miles de niyutas de kotis de eones. De un gran infierno pasarán a otro. Tras un buen tiempo, su mundo será consumido por el fuego. Entonces ellos serán arrojados dentro de los grandes infiernos en otro sistema de mundo, donde de nuevo pasarán de un gran infierno a otro gran infierno. Cuando también ese mundo es consumido por el fuego, su karma aún no estará agotado, tendrá aún algún residuo de eficacia y, pereciendo allí, de nuevo renacerán en grandes infiernos, y experimentarán grandes sufrimientos en ellos, hasta el momento en el que este mundo es consumido una vez más por el fuego. Por lo tanto, como vemos, ellos experimentarán un karma que supone muchas sensaciones dolorosas. ¿Y por qué? Porque sus enseñanzas eran tan malas.
Shariputra: ¿Incluso las consecuencias de las Cinco Grandes Faltas no guarda proporción con esta conducta errónea de mente y habla?
El Señor: No la guarda. Todos aquellos que se oponen a esta Perfección de la Sabiduría, y que disuaden a otros de ella, son personas a quienes yo no les garantizo ninguna visión. ¿Cómo puede uno llegar a intimar con ellos, cómo pueden obtener riqueza, honor, posición? Como una cuestión de hecho, ellos deberán de ser vistos como difamadores del Dharma, como mera basura, como canallas, como meras víboras. Son personas que traen el infortunio, arruinarán a aquellos que los escuchen. Pues aquellos que difaman a la Perfección de la Sabiduría, deberían de ser vistos como personas que difaman al Dharma.
Shariputra: El Señor no nos ha contado el tiempo que tal persona tiene que pasar en los grandes infiernos.
El Señor: Déjalo, Shariputra. Si esto fuera anunciado, aquellos que lo oyen tendrían que tener cuidado del miedo a que brote sangre caliente de sus bocas; del miedo a que ellos sufran la muerte, o dolores mortales; del miedo a la opresión del peso aplastándolos; del miedo al dardo del dolor entrando en sus corazones; del miedo a ser arrojados por un gran precipicio; del miedo a estar secos y marchitos; del miedo de que sean dominados por los grandes terrores.
Así que el Señor rehusó a contestar a la pregunta del Venerable Shariputra. Por una segunda vez, por una tercera vez, el Venerable Shariputra habló así al Señor: “Dime, Oh Señor, el tiempo que esa persona permanece en los infiernos, como una advertencia para las futuras generaciones.”
El Señor: Porque ha conseguido, acumulado, apilado, y reunido este karma de la mente y del habla, él tiene que permanecer durante un largo tiempo en los grandes infiernos. Solo se dará a las futuras generaciones esta advertencia, que él, como consecuencia de la formaciones kármicas no virtuosas de esta conducta errónea de habla y mente, experimentará dolor durante tan largo tiempo. El mero anuncio de lo inmensurable, y de la magnitud de su sufrimiento, será una causa suficiente de ansiedad para los virtuosos hijos e hijas de una buena familia. Ello los apartará de las actividades que conducen a la ruina del Dharma, ellos causarán la generación de mérito, y ellos no rechazarán el buen Dharma, ni tan siquiera para salvar sus vidas, pues ellos no desean encontrarse con tales sufrimientos.
Subhuti: Dicha persona debería de llegar a estar bien controlada en sus acciones de cuerpo, habla, y mente. Pues tan gran montón de demérito es engendrado por dicha falsa enseñanza. ¿Cuál es, Oh Señor, el hecho que genera tan gran montón de demérito?
El Señor: Esa falsa enseñanza. Aquí habrá hombres engañados, personas que han abandonado el mundo por la bien enseñada Disciplina del Dharma; quienes decidirán difamar, rechazar, y oponerse a esta Perfección de la Sabiduría. Pero oponerse a la Perfección de la Sabiduría es oponerse a la Iluminación de los Budas y Señores. Y también significa que uno se opone a la omnisciencia de los Budas y Señores en el pasado, futuro, y presente. Oponerse a la omnisciencia quiere decir oponerse al buen Dharma. Oponerse al buen Dharma significa oponerse a la comunidad de Discípulos del Tathagata. Y cuando uno se opone también a la comunidad de Discípulos del Tathagata, entonces es expulsado en todas y cada una de las formas de la Tres Joyas. Entonces uno desarrollado una formación kármica no virtuosa que es mayor que lo inmensurable e incalculable.
Subhuti: ¿Por qué razón esta gente cree que ellos debieran de oponerse a esta Perfección de la Sabiduría?
El Señor: Tal persona está acosada por Mara (el Maligno). Su karma lo conduce a la debilidad en la sabiduría, y de esta forma él no tiene fe, o confianza serena en las enseñanzas profundas. Dotado con estos dos fenómenos malvados, él se opone a esta Perfección de la Sabiduría.
Además, Subhuti, esa persona será uno que está en las manos de malos amigos; o puede ser uno que aún no ha practicado; o uno que se ha establecido en los agregados; o uno que se ensalza a sí mismo y que desaprueba a los demás, buscando faltas.
Esta persona que cree que la Perfección de la Sabiduría debería de ser desafiada cuando está siendo enseñada, estará dotada con estos cuatro atributos.
 
 
 
Trad. al castellano por el ignorante y falto de devoción upasaka Losang Gyatso.

viernes, 21 de septiembre de 2012

Sutra de la Perfección de la Sabiduría en 8000 Lineas. Capítulo 6

CAPÍTULO SEIS: DEDICACIÓN Y JÚBILO.

 

EL MÉRITO SUPREMO DE LA DEDICACIÓN Y EL JÚBILO. (1)

 

Maitreya: Por un lado tenemos, de parte de un Bodhisattva, el trabajo meritorio que está basado en su regocijo de dedicar el mérito a otros, y en su dedicación de ese mérito a la suprema iluminación de todos los seres; del otro lado está, de parte de todos los seres, el trabajo meritorio basado en la generosidad, la moralidad, en el desarrollo en la meditación. Entre estos, el trabajo meritorio de un Bodhisattva basado en el júbilo y la dedicación se ha declarado como el mejor, el más excelente y sublime, el más elevado y supremo, con nada sobre él, inigualado, igual a lo inigualado.

 

EL ALCANCE DEL JÚBILO. (2)

 

Subhuti: Un Bodhisattva, un Gran Ser, considera al mundo con sus diez direcciones, extendiéndose hacia todas partes en cada dirección. El considera los sistemas de mundos, completamente inmensurables, completamente más allá del cálculo, completamente sin medida, completamente inconcebibles, infinitos e ilimitados.

El considera a los Tathagatas del periodo pasado, en cada dirección, en cada sistema de mundos, completamente inmensurables, completamente más allá del cálculo, completamente sin medida, completamente inconcebibles, infinitos e ilimitados, quienes han alcanzado el Nirvana en el reino del Nirvana, el cual no deja residuos- sus huellas interrumpidas, su discurrir cortado, sus obstáculos anulados, guías de lo conveniente, sus lágrimas secadas, con todos sus impedimentos destruidos, con sus propias cargas posadas, con su propio bien alcanzado, en quienes los grilletes del devenir están extinguidos, cuyos pensamientos están bien liberados por la correcta comprensión, y que han logrado la más elevada perfección en el interior de sus corazones.

El considera desde donde ellos comienzan con el pensamiento de la iluminación, siguiendo hasta el momento en el que ellos obtienen la Completa Iluminación, hasta que ellos finalmente entran en el Nirvana en el Reino del Nirvana que no deja residuos; todo el intervalo de tiempo hasta la desaparición del buen Dharma (tal como fue predicado por cada uno de esos Tathagatas).

El considera la gran cantidad de moralidad, la gran cantidad de concentración, la gran cantidad de sabiduría, la gran cantidad de liberación, la gran cantidad de visión y de sabiduría de la liberación de esos Budas y Señores.

En suma, él considera la acumulación de mérito asociada con las seis perfecciones, con el logro de las cualidades de un Buda, y con las perfecciones de la Intrepidez y de los poderes; y también aquellos asociados con la perfección de los súper conocimientos, de la comprensión, de los votos; y la acumulación de mérito asociada con la realización de la sabiduría de la omnisciencia, con la atención hacia los seres, la gran amistad y la gran compasión, y las inmensurables e incalculables cualidades de un Buda.

El también considera la Completa Iluminación y su felicidad, y la perfección de la soberanía sobre todos los fenómenos, y la obtención del inmensurable o inconquistado poder supremo maravilloso que lo conquista todo; y el poder de la sabiduría del Tathagata que es verdaderamente real, que está sin envoltura, apego u obstrucción, inigualable, igual a lo inigualable, incomparable, sin medida; y el poder de la sabiduría de un Buda, que es preeminente entre todos los poderes, el logro de esa suprema serenidad que resulta de los Cuatro Fundamentos de la Intrepidez; y el Logro del Dharma a través de la realización de la realidad última de todos los fenómenos.

El también considera el giro de la Rueda del Dharma, el llevar la Antorcha del Dharma, el golpear el Tambor del Dharma, el colmar la Caracola del Dharma, el empuñar la Espada del Dharma, el derramar la Lluvia del Dharma, y el refrescar a todos los seres a través del Regalo del Dharma, a través de exponérselo a ellos.

El considera después la acumulación de mérito de todos aquellos que son educados y adiestrados por estas exposiciones  del Dharma- tanto que tengan que ver con los fenómenos de los Budas, de los Realizadores Solitarios (Pratyekabuddhas), o de los Discípulos- que creen en ellas, que están absortos en ellas, que están comprometidos en culminar la Completa Iluminación.

El también considera la acumulación de mérito, asociada con las seis perfecciones, de todos aquellos Bodhisattvas para los que los Budas y Señores han predicho la Completa Iluminación.

El considera la acumulación de mérito de todas aquellas personas que pertenecen al Vehículo de los Realizadores Solitarios, y para quienes ha sido predicha la iluminación del Realizador Solitario.

El considera el meritorio trabajo basado en la generosidad, la moralidad, y el desarrollo meditativo, de las cuatro asambleas de esos Budas y Señores, las asambleas de los monjes y monjas, de los laicos y laicas.

El considera las raíces de virtud plantadas durante todos los tiempos por dioses, nagas, yakshas, gandharvas, asuras, kinnaras, y mahoragas, por hombres y fantasmas, y también por los animales, en el tiempo en el que esos Budas y Señores enseñaron el Dharma; y cuando ellos entraron en el Paranirvana, y cuando ellos ya han entrado en el Paranirvana gracias a los Budas, los Señores, gracias al Dharma, gracias a la Sangha, y gracias a las personas de mente correctamente instruida.

En su meditación el Bodhisattva apila las raíces de virtud de todos ellos, toda esa cantidad de mérito sin excepción o resto, los enrolla, los pesa, y se regocija con ello con el más excelente y sublime júbilo, el más elevado y supremo júbilo, con nada superior a él, inigualable, igualando lo inigualable.

Regocijándose de esta forma, el pronuncia la sentencia: “Yo dedico a la Completa Iluminación todo el meritorio trabajo basado en el júbilo. ¡Que pueda alimentar la Completa Iluminación mía y de todos los demás seres!”

 

UN PROBLEMA METAFÍSICO (3)

 

Bien, con respecto a esos fundamentos en los que la persona perteneciente al Vehículo de los Bodhisattvas se ha regocijado, con respecto  a esos soportes objetivos, y a esos puntos de vista que él aprehendió de esa forma, ¿Eso debería de ser tratado como signos?

Maitreya: No, no debieran.

Subhuti: Si él trata como un soporte objetivo, o como un sigo, a esa base la cual no existe, y a ese soporte el cual no existe, entonces…¿No tendría él una percepción, un pensamiento, una visión pervertida? Pues en una persona codiciosa también, cuando ha discriminado una entidad no existente, y ha ponderado sobre ella- pensando que hay permanencia en la impermanencia, felicidad en el sufrimiento, el yo en lo que no es el yo, lo agradable en lo que es repulsivo- allí surge una percepción pervertida, un pensamiento pervertido, una visión pervertida. Y como la base (la entidad), el soporte objetivo, y el punto de vista (son no existentes), así también es la iluminación, así es el pensamiento de la iluminación, y así son todos los fenómenos. ¿Qué puntos de vista transforma ese pensamiento en Completa Iluminación, o qué trabajo meritorio basado en el júbilo transforma él en qué Suprema, Correcta, y Perfecta Iluminación?

Maitreya: Esto no debiera de ser enseñado o expuesto frente a un Bodhisattva que ha comenzado el camino en el Vehículo recientemente. Pues él perdería esa pequeña fe, la cual es suya; ese pequeño afecto, serenidad, y respeto que son suyos. Esto debería de ser enseñado y expuesto frente a un Bodhisattva irreversible.

Sucesivamente, un Bodhisattva que es apoyado por un buen amigo, por ello, no debería de estar acobardado, ni llegar a ser impasible, ni desanimarse, ni deprimirse, ni debería de no apartar su mente de ella, ni tener sus apoyos rotos, ni temblar estando asustado, estando aterrorizado. Y de esta forma, el Bodhisattva transforma en omnisciencia todo el trabajo meritorio basado en el júbilo.

Subhuti: El pensamiento por el que uno se ha regocijado, y que ha transformado, o dedicado, eso (la raíz de virtud relacionada con el júbilo), ese pensamiento de regocijo, a la hora de convertirlo está extinto, parado, ido, cambiado. Por lo tanto, ¿Qué es ese pensamiento el cual uno dedica a la Completa Iluminación? ¿O qué es ese pensamiento que convierte en Completa Iluminación el trabajo meritorio basado en el júbilo? O si dos pensamientos no pueden encontrarse nunca a la vez, ¿Cómo puede uno por medio de un pensamiento transformar, o dedicar, un pensamiento? No es posible cambiar o transformar ese pensamiento en cuanto a su propia esencia se refiere.

Sakra: Los Bodhisattvas que han comenzado a caminar hace poco en el Vehículo, deberían de cuidarse de sentir miedo cuando han oído esta exposición. Entonces, ¿Cómo debería transformar un Bodhisattva ese trabajo meritorio basado en el júbilo, en Completa Iluminación? ¿Y cómo alguien que coge ese pensamiento relacionado con el trabajo meritorio basado en el júbilo, tiene éxito en el agarrar a ese pensamiento basado en el júbilo? ¿Y cómo hace que tenga éxito uno que transforma el pensamiento conectado con el júbilo al cambiarlo?

Acto seguido, el Venerable Subhuti dirigió su mente hacia el Bodhisattva Maitreya, concentró su mente en él, y habló esto: “Aquí el Bodhisattva considera el mérito conectado con los Budas y Señores del pasado, de la forma que describimos anteriormente. El amontona las raíces de virtud de todos ellos, toda esa cantidad de raíces de virtud sin excepción y resto; las enrolla en un bulto, las pesa, y se regocija de ello. El entonces dedica el trabajo meritorio basado en el júbilo a la Completa Iluminación. ¿Cómo puede el Bodhisattva, cuando él lo transforma estar sin una percepción pervertida, sin un pensamiento pervertido, sin una visión pervertida?

 

CÓMO PUEDEN EVITARSE LAS VISIONES PERVERTIDAS. (4)

 

Maitreya: El Bodhisattva no tiene, como resultado del pensamiento por el que él transforma eso, que llegar a ser alguien que percibe un pensamiento. Así es como el trabajo meritorio basado en el júbilo llega a ser algo que es transformado en Completa Iluminación. Si él no percibe ese pensamiento, identificándolo como: “Esto es ese pensamiento”, entonces un Bodhisattva no tiene ni percepción, ni pensamiento, ni visión pervertida. Pero si él percibe el pensamiento por el que transforma eso, identificándolo como: “Este es ese pensamiento”, entonces él llega ser alguien que percibe el pensamiento. Como resultado, él tiene una percepción, pensamiento, y visión pervertida. Pero un Bodhisattva transforma correctamente, no erróneamente, cuando el percibe y lleva a la mente el pensamiento que transforma, de forma que él lo ve como: “exactamente extinto, extinto”, como: “parado, ido, cambiado”; y cuando él reflexiona que eso que está extinto, no puede ser cambiado; y que eso que es así es la verdadera naturaleza de ese pensamiento el cual uno transforma, y también de los fenómenos a través de los cuales uno transforma, al igual que de los fenómenos a los que uno transforma. Así es como el Bodhisattva debiera de transformar. El debería de considerar a los Budas del futuro, a los Budas del presente, a los Budas del pasado, futuro, y presente, de la misma forma en que consideró a los Budas del pasado.

¿Bajo qué circunstancias la percepción, el pensamiento, y la visión carecen de perversión? Si, mientras transforma, él trae a su mente aquellos fenómenos como “extinto, parado, ido, cambiado”; y ese fenómeno en el cual es transformado, como algo inextinguible, entonces la raíz de virtud llega a ser algo que ha sido transformado en Completa Iluminación. Pues él no se establece en ese proceso de dedicación. Si además el considera que ningún fenómeno puede ser transformado en un fenómeno, entonces también llega a ser algo que ha sido transformando en Completa Iluminación. Así es como el Bodhisattva que transforma está sin percepción, pensamiento, ni visión pervertida. Pues él no se establece en ese proceso de dedicación. Si además el percibe que el pensamiento no puede conocer al pensamiento, ni el fenómeno puede conocer al fenómeno, entonces también llega a ser algo que ha sido transformado en completa iluminación. Esta es la suprema madurez del Bodhisattva. Pero si por otro lado, un Bodhisattva percibe esa acumulación de mérito, entonces no puede transformarla en Completa Iluminación. Porque él se establece en ese proceso de dedicación. Si además él reflexiona que también esta acumulación de mérito es única y sosegadamente calma, y que también el trabajo meritorio basado en el júbilo es único y sosegadamente calmo, entonces él lo transforma en Completa Iluminación. Si además el no percibe siquiera que todos los eventos condicionados son sosegadamente calmos y únicos, entonces esa es la Perfección de la Sabiduría de ese Bodhisattva. Pero el no transforma en Completa Iluminación, si él percibe que esto de aquí es la raíz de virtud de los Budas, los Señores, que han ido al Paranirvana; que esa raíz de virtud es solo una ilusión, por lo que lo que es transformado es del mismo tipo, tiene la misma marca, pertenece a la misma clase, tiene la misma esencia. Pues los Budas y Señores no permiten que una dedicación tenga lugar a través de un signo. El no lleva a la mente, o transforma, esa raíz de virtud en Completa Iluminación, si él produce un signo por reflexionar que es pasado, que está extinto, parado, ido, cambiado; que eso que es futuro, aún no ha llegado; y que a eso que es presente, llega a encontrársele estabilidad; y que eso que no es encontrado, no tiene signo o extensión. Por otro lado, él tampoco transforma en Completa Iluminación si él falla al producir un signo, o al llevarlo a la mente ,como resultado de estar completamente falto de atención, si él deja de atender como resultado de una falta de atención mental plena, o como una falta de comprensión. Pero esa raíz de virtud llega a ser algo que ha sido transformado en Completa Iluminación, bajo la condición de que él lleva a la mente ese signo, pero no lo trata como un signo. Es por ello por lo que el Bodhisattva debería de entrenarse en esto. Esto debería de ser conocido como su destreza en los medios hábiles. Cuando a través de la destreza en los medios hábiles, él transforma una raíz de virtud, entonces él está cerca de la omnisciencia. El Bodhisattva que quiere entrenarse en esta habilidad en los medios debería, no obstante, escuchar constantemente esta Perfección de la Sabiduría, estudiarla, y hacer preguntas respecto a ella. Puesto que sin la ayuda de la Perfección de la Sabiduría, uno no enseñado no puede entrar en la labor de la dedicación por medio de la Perfección de la Sabiduría. Pero uno no debiera al efecto hacer la afirmación de gracias a la Perfección de la Sabiduría es posible transformar ese trabajo meritorio en Completa Iluminación. Pues aquellas vidas personales están paradas, aquellas formaciones kármicas están paradas, tranquilamente calmas, aisladas, careciendo de base. Además, esa persona que produjo un signo, y que hizo una discriminación, percibe que es verdaderamente real lo que no es verdaderamente real, como si fuera verdaderamente real; y él transformaría una base en lo que carece de bases. Los Budas, los Señores, no permiten que sus raíces de virtud lleguen a ser algo que sea transformado de esta forma en Completa Iluminación. Pues ellas llegan a ser para él una gran base. Incluso él trata como un signo, y discrimina, al Paranirvana de los Budas, él estropea el Nirvana debido a su punto de vista, y no es la dedicación llevada a cabo por alguien que percibe una base, lo que los Tathagatas han llamado una fuente de gran bienestar. Pues este proceso de dedicación no carece de veneno, ni de espinas. Es lo mismo que una comida que parece excelente, pero que es realmente venenosa. Su color, olor, gusto, y tacto parecen deseables, pero sin embargo, debería de ser evitada como venenosa, y no ser comida por la gente prudente. Aunque sea comida, y la gente estúpida pueda pensar que debería de ser ingerida. El color, olor, gusto, y tacto de esa comida promete felicidad, pero su transformación en un hombre que la comiera, lo llevaría a un doloroso final. Como resultado, él sufriría la muerte, o dolores mortales. De la misma forma, algunos (perceptores de una base) que malamente comprenden el significado de lo que está bien enseñado, que malamente lo distinguen, que malamente lo dominan, y lo confunden, no comprendiendo el significado tal y como realmente es, instruirán y sermonarán a otros para considerar la masa de mérito de los Budas y Señores del pasado, futuro, y presente, de la manera descrita antes, a regocijarse de ella, y a transformar en Completa Iluminación el trabajo meritorio basado en el júbilo. Así, esta transformación, puesto que ha sido llevada a cabo por medio de un signo, es transformada en algo venenoso. Es como la comida venenosa mencionada anteriormente. No puede haber transformación para alguien que percibe una base. Pues una base es venenosa. Por consiguiente, una persona que pertenece al Vehículo de los Bodhisattvas no debería de entrenarse así.

¿Cómo debería de entrenarse entonces? ¿Cómo debería de procurarse la raíz de virtud de los Budas del pasado, futuro, y presente? ¿Y cómo hace para que eso que es procurado llegue a ser exitosamente conseguido? ¿Cómo lo transformaría? ¿Y cómo llega a ser algo que es transformado exitosamente en Completa Iluminación? Aquí, el hijo o la hija de una buena familia que pertenece al Vehículo de los Bodhisattvas, y que no quiere calumniar al Tathagata, debería de regocijarse así de toda esa raíz de virtud, debería de transformarla así: “Yo me regocijo en esta raíz de virtud, considerada como los Tathagatas, con su Sabiduría de Buda, y con su Ojo de Buda, conocen y ven- su tipo tal y como es, su clase tal y como es, su cualidad tal y como es, su esencia tal y como es, su marca tal y como es, y su forma de existencia tal y como es. Y yo lo transformo de esa manera en la que los Tathagatas pueden permitir que esa raíz de mérito sea transformada en Completa Iluminación.”

Cuando se regocija así, cuando transforma así, un Bodhisattva llega a estar libre de culpabilidad. La rectitud de los Budas y Señores se regocija en ello. Esa raíz de virtud llega a ser algo que ha sido transformado en Completa Iluminación. Y él no calumnia a aquellos Tathagatas. De esta forma, su transformación llega a ser una transformación no venenosa, una gran transformación, una transformación en el Dharmadhatu (el elemento, la naturaleza de Buda); llega a ser perfecto, completamente perfecto, a través de la fervorosa intención y de su determinación que transforma. Además, alguien que pertenece al Vehículo de los Bodhisattvas debería de transformar la comprensión de que toda la ética moral, la concentración, la sabiduría, la liberación, la visión, y el conocimiento de la liberación, están excluidos del Reino del Deseo, del Reino de la Forma, y del Reino Sin Forma; y que no son pasado, futuro, o presente. Pues todo lo que está incluido en los tres periodos de tiempo, o en los Tres Reinos, no está incluido (en la realidad última). En consecuencia, la transformación también está excluida, y así ocurre con el fenómeno (budeidad) en el que ese proceso de transformación está siendo cambiado- solo si él firmemente cree eso. Cuando un Bodhisattva transforma de esa forma, el nunca puede volver a perder lo transformado, y llega a convertirse en excluido, no venenoso, una gran transformación, una transformación en el Dharmadhatu, perfecta, completamente perfecta. Pero por otro lado, cuando se establece en lo que él transforma, y lo trata como un signo, entonces el transforma de forma equivocada. Sin embargo, un Bodhisattva transforma con la idea de que es a través de su transformación en el Dharmadhatu, tal y como los Budas, los Señores, saben y permiten, que esa raíz de virtud ha sido transformada en Completa Iluminación, que ha sido exitosamente transformada. Este es el método correcto de transformar. Y de esta forma llega a ser algo que ha sido transformado en Completa Iluminación, exitosamente transformada.

El Señor: Bien dicho, Subhuti, bien dicho. Tu cumples el oficio de Maestro cuando les muestras el Dharma a los Bodhisattvas. Pues esta transformación, la cual es la transformación del Dharmadhatu, es lo que es la transformación de un Bodhisattva. El piensa: “Tal como los Budas y Señores conocen y ven esa raíz de virtud en su verdadera naturaleza- su tipo tal y como es, su clase tal y como es, su cualidad tal y como es, su esencia tal y como es, su marca tal y como es, su forma de existencia tal y como es- de esa forma yo me regocijo en ello. Y como ellos otorgan su permiso, yo la transformo así”.

 

RETRIBUCIONES DEL MÉRITO (5)

 

Este montón de mérito de un Bodhisattva, el cual nace de su transformación en el Dharmadhatu, que es declarado como siendo superior a la acumulación de mérito por parte de alguien que instigara a, y que estableciera, en las diez formas de acción virtuosa a todos los seres en los grandes macrocosmos de tercer orden, que son incontables como las arenas del Ganges. Y también continúa siendo superior si aquellos seres obtuvieran las Cuatro Concentraciones, o los Cuatro Ilimitados, o los Cuatro Logros sin Forma, o los Cinco Súper Conocimientos; o igualmente si ellos llegaran a Entrar en la Corriente, etc, hasta llegar a Pratyekabuddha. Esto no es todo. Si todos los seres, en todos los sistemas de mundos, hubieran tomado el camino hacia la Suprema Iluminación, y si, Subhuti, cada Bodhisattva fuera a proveer, durante eones tan incontables como las arenas del Ganges, a todos aquellos seres en los distintos grandes macrocosmos de tercer orden, incontables como las arenas del Ganges, con todo lo que ellos pudieran necesitar; ellos darían ese regalo mientras están percibiendo una base. Y si procediendo de esta manera, nos imaginamos que todos aquellos seres son una solo, y si cada Bodhisattva proveyera durante eones tan incontables como arenas hay en el Ganges a todos aquellos Bodhisattvas, con todo lo que ellos pudieran necesitar, y los trata con respeto; si de esta forma cada uno de todos aquellos Bodhisattvas, si todos ellos juntos dieran ese regalo, ¿No engendrarían un gran mérito aquellos Bodhisattvas por la fuerza de esto?

Subhuti: Una gran cantidad, sin duda, Oh Señor. Ese montón de mérito incluso desafiaría al cálculo. Si fuera una cosa material, no se le podría encontrar alojamiento incluso en los grandes macrocosmos de tercer orden, tan incontables como las arenas del Ganges.

El Señor: Así es, Subhuti. Y aún así, esta acumulación de mérito debido a la generosidad, por parte de los Bodhisattvas, que lo perciben como una base, es infinitesimal comparado con el mérito generado por alguien que pertenece al Vehículo de los Bodhisattvas, y que ha conseguido por la Perfección de la Sabiduría y por la destreza en los medios hábiles, transformar esa raíz de virtud en Completa Iluminación, por medio de transformar el Dharmadhatu. Pues aunque los Bodhisattvas que percibieron una base han dado muchos buenos regalos, ellos también los consideran como “mucha cantidad de algo que es bueno”.

En eso, veinte mil dioses de los Cuatro Grandes Reyes, con las manos juntas, rindieron homenaje al Señor, y dijeron: “Esta transformación en omnisciencia de todas las raíces de virtud, por aquellos que han sido producidos por la Perfección de la Sabiduría y por la destreza en los medios hábiles, es una gran transformación de los Bodhisattvas. Porque sobrepasa a la acumulación de mérito, derivada de la generosidad, de aquellos Bodhisattvas que están basados en algo, no importa lo grande que pueda ser.”

Entonces, una vez más, los cien mil dioses de los Treinta y Tres derramaron sobre el Señor flores celestiales, incienso, perfumes, guirnaldas de flores, ungüentos, polvos aromáticos, joyas, y ropas. Ellos adoraron al Señor con parasoles celestiales, estandartes, campanas, banderas, y con filas de lámparas alrededor, y con muchos tipos de adoración. Ellos tocaron, en honor del Señor, instrumentos celestiales, y dijeron: “Esta transformación del Dharmadhatu es seguramente una gran transformación del Bodhisattva. Porque supera al montón de mérito acumulado que resulta de los regalos de los Bodhisattvas que tienen una base en algo; porque esa gran transformación ha sido conseguida por la Perfección de la Sabiduría, y por la destreza en los medios.”

Todas las demás clases de dioses aparecieron en escena, adoraron al Señor, y elevaron sus voces. Ellos dijeron: “Es maravilloso, Oh Señor, hasta qué punto esta transformación de una raíz de mérito por parte de los Bodhisattvas, que ha sido conseguida por la Perfección de la Sabiduría y por la destreza en los medios hábiles, sobrepasa al montón de mérito de aquellos Bodhisattvas que tienen una base en algo, aunque haya sido acumulado durante tan largo tiempo, y fuera conseguido por tan muy diversos esfuerzos.”

Entonces, el Señor les dijo a todos aquellos dioses, desde los Dioses de las Moradas Puras hacia abajo: “Consideremos el caso de la acumulación de mérito de todos los seres, en incontables sistemas de mundos, que se han puesto en camino definitivamente hacia la Completa Iluminación, y que han dado regalos para ganar la Completa Iluminación. De la misma forma, consideremos el caso de todos los seres, en incontables sistemas de mundos, que habiendo hecho el voto de lograr la Completa Iluminación, y habiendo elevado sus aspiraciones hacia la iluminación, darían regalos en una escala tan grande como la descrita con anterioridad. Por otro lado consideremos a un Bodhisattva, conseguido por la Perfección de la Sabiduría y de la destreza en los medios hábiles, que consigue las raíces de virtud de todos los Budas, Pratyekabuddhas, y Discípulos, y también él consigue de todos los demás seres las raíces de virtud que ellos ya han plantado, las que serán plantadas, y las que están siendo plantadas; y que se regocija en ellas tal y como se ha descrito antes. Entonces, la acumulación de mérito de los primeros Bodhisattvas que dieron regalos mientras percibían una base, es infinitesimal- solo porque percibieron una base.”

Subhuti: El Señor ha descrito el júbilo respecto de las raíces de virtud de todos los seres como el “júbilo más excelente.” ¿Por qué razón es este el “júbilo mas excelente”?

El Señor: Si una persona que pertenece al Vehículo de los Bodhisattvas, no se agarra a los fenómenos del pasado, futuro, y presente, no se preocupa por ellos, no averigua sobre ellos, no construye ni discrimina, no los ve o examina, si él considera con la convicción de que todos los fenómenos son fabricados por las construcciones mentales, que son no nacidos, que no vienen de ningún lado, no vinieron, ni se han ido; y que ningún fenómeno ha sido producido o cesado nunca en el pasado, futuro, o presente; si él considera a los fenómenos de dicha forma, entonces su júbilo está de acuerdo con la verdadera naturaleza de aquellos fenómeno, y así es su transformación (del mérito) en Completa Iluminación.

Esta es la primera razón por la que el júbilo del Bodhisattva es el “más excelente.”

El trabajo meritorio basado en la generosidad por parte de los Bodhisattvas que perciben una base, quienes tienen una base en la visión, es infinitesimal comparado con la transformación de la raíz de virtud de ese otro Bodhisattva. Además, Subhuti, alguien que pertenece al Vehículo de los Bodhisattvas, y que quiere regocijarse en las raíces de virtud de todos los Budas y Señores, debería de regocijarse de esta forma:”Como es la liberación (que es no originada puesto que los obstáculos de las impurezas y los obstáculos al conocimiento han cesado), así es la generosidad, así la moral ética, etc, así el júbilo, así el trabajo meritorio basado en el júbilo; como la liberación, así es la transformación, así son los Budas y Señores, los Pratyekabuddhas, y los Discípulos que han entrado en el Paranirvana; como la liberación, así es transformación, así son los fenómenos que han pasado o cesado; e idénticamente los fenómenos que son futuro, o que aún no están producidos; y los fenómenos que son presente, o que se están siendo producidos ahora mismo; como la liberación, así son todos los Budas y Señores del pasado, futuro, y presente. Por lo tanto, yo me regocijo, con el más excelente júbilo, en la verdadera naturaleza de esos fenómenos, los cuales son no atados, no liberados, no apegados. Por consiguiente, yo transformo ese trabajo meritorio basado en el júbilo, en Completa Iluminación; pero realmente ninguna transformación tiene lugar, porque nada está muerto, nada destruido.

Esta es la segunda razón por la que el mérito de un Bodhisattva es el “más excelente.”

Pero volviendo a la pregunta del mérito. Consideremos ahora el caso en donde todos los seres en incontables sistemas de mundos se han encaminado definitivamente hacia la Completa Iluminación, y donde, para avanzar hacia la Completa Iluminación, durante incontables eones ellos aceptaron la obligación de observar la ética moral, con la buena conducta de cuerpo, habla, y mente- pero mientras perciben una base. No obstante, su acumulación de mérito es infinitesimal comparado con la acumulación  de un Bodhisattva cuyo mérito deriva del júbilo- solo porque ellos perciben una base. Y lo mismo sería verdad si todos esos seres practicaran la paciencia durante incontables eones, aunque sufrieran muchos insultos, golpes, e injurias; o si practicaran el esfuerzo, y bajo ninguna circunstancia estuvieran deprimidos, o conquistados por la pereza y aburrimiento; o si finalmente ellos entran en las concentraciones. Mientras que ellos lleven a cabo estas prácticas cuando aún perciben una base, su mérito será infinitesimal comparado con el de los Bodhisattvas que se regocijan de las raíces de virtud de todos los seres, con el más excelente júbilo, y transforman esta raíz de virtud en la Suprema Iluminación.

 

 

 

Trad. por el ignorante y falto de devoción upasaka Losang Gyatso.