martes, 3 de octubre de 2017

Sutra del Desarrollo de la actividad completa (Lalitavistara) Capítulo Tres. La pureza de la familia.

CAPÍTULO TRES: LA PUREZA DE LA FAMILIA.


Monjes, el bodhisatva fue exhortado de esta forma con respecto a que la hora del Dharma había llegado. Saliendo de ese gran palacio celestial, el bodhisattva de dirigió al gran Palacio de Dharmoccaya, donde él enseñó el Dharma a los dioses del Cielo de Tushita.
En el palacio, el se sentó sobre un trono de león conocido como el Dharma Sublime. Allí estaba reunido con un grupo de hijos de los dioses cuya buena fortuna igualaba a la del bodhisatva, y quienes habían entrado en el mismo vehículo. Llegando de los mundos de las diez direcciones, se habían reunido bodhisatvas poseedores de una conducta similar a la del bodhisatva. Los hijos de los dioses también estaban acompañados de séquitos con intenciones igualmente puras, sin la asamblea de las doncellas celestiales y de los hijos de los dioses ordinarios. Todos ellos formaban un séquito de 680 millones, entraron en el palacio, y cada uno de ellos se sentó en un trono de león de acuerdo a su rango.
Entonces fue, oh monjes, cuando el bodhisatva dijo: “En doce años, el bodhisatva entrará en el vientre de su madre.”
En ese tiempo, los hijos de los dioses de los cielos de las moradas puras descendieron a Jambudvipa, y ocultaron sus formas divinas tomando la apariencia de brahmines,  enseñaban los Vedas a otros brahmines. Ellos hicieron saber que quien entraba en el vientre de esa manera [14] sería un gran ser que poseería las treinta y dos marcas.

Ellos dijeron: “Alguien que posea estas treinta y dos marcas solo podrá ser dos cosas. No existe una tercera opción. Si ese individuo viviera como un cabeza de familia, el llegaría a ser un monarca universal con los cuatro cuerpos de ejército[1]. El llegaría a ser un conquistador, un rey del Dharma. Ese rey tendría los siete tesoros: la rueda preciosa, el elefante precioso, el caballo precioso, la joya preciosa, la esposa preciosa, el administrador precioso, y el ministro precioso.

¿Cómo un monarca universal llega a poseer la rueda preciosa? Esa rueda solo puede pertenecer a un rey que ha sido elevado al rango supremo dentro de la clase gobernante. En el quinto día del mes lunar, mientras observa el ayuno de posadha, el rey lavará primero su cabeza, y entonces se dirigirá a la terraza más elevada del palacio, rodeado de las mujeres de su casa. Entonces, desde el Este, aparecerá una rueda divina preciosa de mil radios. La rueda, la cual no ha sido hecha por ningún herrero, es redonda; con un cubo central, hecha enteramente de oro, y con la altura de siete árboles de tāla.
Esta rueda divina preciosa de oro pertenecerá ahora al rey, quien ha sido elevado al rango más alto dentro de la clase gobernante.
Cuando la vea, pensará para sí mismo: “Yo he oído que si una rueda preciosa divina aparece desde el Este cuando un rey, que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante, asciende al piso más alto del palacio mientras está rodeado por un séquito compuesto por todas las mujeres de la casa, cuando se está observando el ayuno de posadha durante el quinceavo día del mes lunar, este se convertirá en un monarca universal. Puesto que yo ahora puedo percibir claramente esta rueda preciosa divina, con total certeza yo tengo que ser un monarca universal.”
Entonces, el rey que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante, descubrirá uno de sus hombros de su manto, y se arrodillará en el suelo sobre su rodilla derecha. Girando la rueda preciosa con su mano derecha, proclamará: “Rueda preciosa, por favor, gira en armonía con el Dharma, en vez de girar de acuerdo con aquello que no es el Dharma.”
La rueda preciosa divina, puesta en marcha por el rey elevado al rango más alto de la clase gobernante, viajará mágicamente a través del espacio hacia el Este, seguida por el monarca universal y sus cuatro cuerpos de ejército. Donde quiera que la rueda llegue a pararse, el rey elevado al rango más elevado de la clase gobernante y sus cuatro cuerpos de ejército establecerán su campamento.
Según va viajando, los reyes provinciales de los países del Este vendrán a saludarlo portando vasos de plata repletos de polvo de oro, y vasos de oro repletos de fragmentos de plata. Ellos le dirán: “Bien venido, señor. Por favor, ven. Este reino es tuyo. Es extremadamente vasto y próspero. Las cosechas son abundantes, y es deleitante y populoso. Indudablemente, está lleno de gente. Ahora que has llegado a esta tierra, señor, es tuyo. Te pedimos que te quedes.”
En su réplica a los reyes provinciales, el que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante, responderá: “Podéis gobernar vuestros respectivos reinos de acuerdo al Dharma, pero no de acuerdo a aquello que no es el Dharma. No matéis a los seres; no cojáis lo que no os ha sido dado; y no os involucréis en conductas sexuales incorrectas. Similarmente, deberéis absteneros de contar mentiras, de sembrar la discordia, de insultar, y de hablar frivolidades. No permitáis que vuestra mente sea vencida por la codicia, la malicia, y por las creencias erróneas. Si lo contrario al Dharma apareciera en mis dominios, yo no lo aplaudiría.”
De esta forma el rey, que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante, conquistará el Este.
Tras haber conquistado el Este, la rueda preciosa se dirigirá entonces hacia los mares del Este. Cruzando sobre ellos, viajará mágicamente a través del espacio hacia el Sur, acompañada por el monarca universal y sus cuatro cuerpos de ejército. Como antes, él conquistará el Sur, y entonces se dirigirá a conquistar el Oeste y el Norte.
Una vez que el rey ha conquistado el Norte, la rueda se moverá hacia los mares del Norte y, viajando mágicamente a través del cielo hasta el palacio real, llegará para descansar a la entrada de las habitaciones del séquito de la reina, sin haber sufrido ningún daño. Es de esta forma como el rey que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante llega a poseer la rueda preciosa.

¿Cómo un monarca universal llega a poseer el elefante precioso? El elefante precioso del rey que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante, aparece de la misma forma en la que apareció la rueda preciosa. De color completamente blanco, el elefante precioso tiene cuatro extremidades, dos colmillos, y una trompa. Su cabeza está adornada con oro, y lleva un estandarte de la victoria dorado. Similarmente, está engalanado con adornos de oro, y cubierto por una malla de oro. [16] Sus poderes mágicos hacen posible que pueda volar en el cielo, y transformarse. Este rey de los elefantes es conocido como Bodhi.
Cuando el rey elevado al rango más alto de la clase gobernante quiere explorar con el elefante precioso, montará en él al romper el día, y viajará a través de su gran tierra, la cual está rodeada por océanos. Después de retornar al palacio real, el reasumirá con cariño sus labores de gobierno. De esta forma, el monarca universal llega a poseer el elefante precioso.

¿Cómo un monarca universal llega a poseer el caballo precioso? El caballo precioso del rey que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante aparece igual que las anteriores. El caballo precioso tiene un cuerpo de color azulado, y una cabeza negra con una crin trenzada. Tiene bridas, portando un estandarte de la victoria dorado y adornos de oro, y está cubierto por una malla dorada. Con sus poderes mágicos es capaz de volar a través del cielo, y de transformarse. Este rey de los caballos es conocido como Bālāhaka.
Cuando el rey que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante quiere probar el caballo precioso, él lo montará al romper el día, y viajará a través de esta tierra la cual está rodeada por océanos. Después de retornar al palacio real, el reanudará gozoso sus labores de gobierno. De esta forma, el monarca universal llega a poseer el caballo precioso.    

¿Cómo un monarca universal llega a poseer la joya preciosa? La joya preciosa del rey que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante aparece igual que las anteriores. Es una gema de lapislázuli de color azul puro, con ocho lados, y un trabajo de artesanía muy fino. Con la luz emitida desde esta joya preciosa todas las dependencias de las mujeres quedaban bañadas de luz.
Cuando el rey que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante quiere probar la joya preciosa, entonces, a medianoche, en completa oscuridad, él la coloca en  el extremo de un estandarte de la victoria y se aventura a salir a los jardines con ella para observar los suelos sublimes. La luz emitida por la joya preciosa iluminará el área circundante  durante toda una legua, incluyendo los cuatro tipos de tropa del ejército del rey. La gente que viva en la vecindad de la joya preciosa será iluminada por su radiación. Viéndose y reconociéndose unos a otros, ellos se dirán unos a otros: “Levantaros, amigos. Comenzad vuestro trabajo e id al mercado. El Sol ya está en lo alto, y ya ha comenzado el día.” De esta forma, el monarca universal llega a poseer la joya preciosa.       

¿Cómo un monarca universal llega a poseer la esposa preciosa?   La esposa preciosa del rey elevado al rango más alto de la clase gobernante aparece como los anteriores. De acuerdo con la tradición, la esposa preciosa ha nacido en la casta de los guerreros. Ella no es demasiado alta, ni demasiado baja; ni demasiado gorda, ni demasiado flaca; ni demasiado morena, ni demasiado pálida. Indudablemente ella es bella, de maneras agradables, y grata para la vista. Está en la flor de la vida, y cada uno de los poros de su cuerpo emite la fragancia del sándalo, mientras que su boca huele con el perfume del loto. Su cuerpo es tan suave al tacto como el más fino de los paños; con en el frío su cuerpo es cálido al tacto, en tiempo caluroso es frío. Su mente, sin mencionar su cuerpo, no desea a nadie más que al monarca universal. De esta forma, el monarca universal llega a poseer la esposa preciosa.

¿Cómo un monarca universal llega a poseer el administrador precioso? El administrador precioso del rey que ha sido elevado al rango más alto de la clase gobernante aparece como los anteriores. Siendo instruido, lúcido, e inteligente, el administrador precioso posee una vista divina que hace posible que descubra tesoros-tanto los propios como ajenos-en un área circundante que alcanza una legua. Con aquellos tesoros que no pertenecen a nadie, él satisface las necesidades materiales del monarca universal. De esta forma, el monarca universal llega a poseer el administrador precioso. [18]

¿Cómo un monarca universal llega a poseer el ministro precioso? El ministro precioso del rey que ha sido elevado al rango más alto de la clase dirigente aparece como los anteriores. El ministro precioso es instruido, lúcido, e inteligente. El monarca universal meramente tiene que pensar en poner en servicio un ejército, y es hecho.  De esta forma, el monarca universal llega a poseer el ministro precioso. Así, el monarca universal posee estos siete tesoros.

El monarca universal también tendrá mil hijos. Siendo valientes, heroicos, y supremamente capaces en cuerpo, esos hijos obtendrán la victoria sobre las fuerzas que se les opongan. Sin recurrir al castigo o a los actos de violencia, el rey gobernará de acuerdo al Dharma, llevando la paz y el orden a todo el amplio reino que se extiende hasta los océanos.

No obstante, si el abandona la vida del cabeza de familia y se hace un monje errante, se convertirá en un Buda. Abandonando al deseo, y sin confiar en nadie como guía, el llegará a ser el maestro de dioses y humanos.”

Con estas palabras los hijos de los dioses inspiraron a los brahmines a recitar los Vedas. De forma similar, otros hijos de los dioses llegaron a Jambudvipa para exhortar a los Realizadores Solitarios[2]. Ellos dijeron: “Oh Nobles, abandonad este Campo de Buda, pues en diez años el bodhisatva entrará en el vientre de su madre.”  

Monjes, en aquel tiempo había un Realizador Solitario llamado Mātangawho, que moraba en el Monte Golāngulaparivartana, en la ciudad de  Rajagraha. Oyendo la exhortación de los dioses, llegó a quedarse tan quieto como el barro sobre una piedra, y entonces se elevó en el cielo hasta la altura de siete árboles tāla. Fusionándose con el elemento fuego, el pasó al nirvana como una antorcha. Su bilis y flema, ligamentos y huesos, y carne y sangre, fueron consumidos completamente por el fuego, no dejando más que unas pocas reliquias esféricas en el suelo. Incluso hoy, son conocidas como las huellas del sabio.   

Monjes, en ese mismo tiempo estaban reunidos 500 Realizadores Solitarios en un parque de ciervos, a las afueras de Varanasi. También ellos oyeron la exhortación de los dioses, y entonces se elevaron en los cielos hasta la altura de siete árboles de tāla y, encendiéndose súbitamente, entraron en el nirvana como si fueran antorchas. [19] Su bilis y flema, ligamentos y huesos, y su carne y sangre fueron completamente consumidos por el fuego. No quedó nada, excepto unas pocas reliquias esféricas que cayeron en el suelo. A partir de ese momento, la aérea llego a ser conocida como Rsipatana,  o la Colina de los Sabios Caídos. La zona también llegó a ser conocida como Mrgadāva, o Parque de los Ciervos, puesto que allí  los ciervos jugueteaban sin miedo.

Monjes, de esta manera el bodhisatva moraba en el Cielo de Tushita, donde él contempló cuatro grandes visiones. ¿Cuáles fueron esas cuatro? El contempló la época de su nacimiento, el continente en el que nacería, el país en el que nacería, y la familia en la cual nacería.

¿Y por qué, monjes, contempló el bodhisatva la época de su nacimiento? Porque un bodhisatva no entra en el vientre de su madre al principio de los tiempos, cuando los seres están aún evolucionando. En vez de ello, el bodhisatva entra en el vientre de su madre cuando el mundo ya está formado, y cuando el nacimiento, la vejez, la enfermedad, y la muerte han llegado  a ser conocidos.

¿Y por qué, monjes, contempló el bodhisatva el continente en el que nacería? Porque un bodhisatva no nace en un continente periférico, ni nace en el continente Este de Pūrvavideha; ni en el continente Oeste de Aparagodānīya; ni en el continente Norte de Uttarakuru. En vez de ello, un bodhisatva nace en el continente Sur de Jambudvipa.

¿Y por qué, monjes, contempló el bodhisatva el país en el que nacería? Porque un bodhisatva no nace en un país periférico donde la gente es estúpida como ovejas, con facultades muy limitadas, ignorantes, e incapaces de distinguir lo correcto de lo erróneo. En vez de esto, un bodhisatva nace en un país central. [20]

¿Y por qué, monjes, el bodhisatva contempló la familia en la que nacería? Porque un bodhisatva no nace en una familia inferior, como en el caso de una familia sin casta[3], recolectores de leña, carreteros, o sirvientes. Un bodhisatva solo nace en dos clases de familias: en la familia de un brahmín, o en una familia de la clase dirigente[4]. Cuando en el mundo dominan las familias de los brahmines, el bodhisatva nace en el seno de una familia de brahmines. Cuando en el mundo son dominantes las familias de Ksatriyas, el bodhisatva nace en una familia de Ksatriyas. Así pues, monjes, en este tiempo las dominantes son las familias de Ksatriyas, y por eso los bodhisatvas nacen en estas familias dirigentes.
Confiando en su capacidad superior, el bodhisatva contempló estas cuatro grandes visiones mientras moraba en el Cielo de Tushita. Tras haberlas visto, permaneció en silencio.

Monjes, entonces los hijos de los dioses y los bodhisatvas se preguntaron unos a otros: “¿Dentro de que familia preciosa renacerá el bodhisatva? ¿En el vientre de qué madre será concebido?”

Algunos dijeron: “La familia Vaideha, en el país de Magadha, es acaudalada, próspera, y feliz. Es un lugar digno para que el bodhisatva sea concebido.”
Entonces hubo otros que respondieron: “Ese no es un lugar digno para que sea concebido el bodhisatva, pues la familia de la madre no es pura, y tampoco la del padre. La fortuna familiar ha venido con poco mérito, y no debido a una vasta acumulación de mérito. Ellos son impetuosos, inestables, e inconstantes. El entorno en su país es desértico, con pocas arboledas, lagos, y estanques. Es una tierra primitiva, parecido a una aldea remota. Por tanto, ese no es un lugar digno para que el bodhisatva nazca.”

Algunos dijeron: “La familia Kosala posee un gran séquito, muchas caballerías, y una gran riqueza. Ese es un lugar digno para que el bodhisatva sea concebido.”
Pero otros replicaron: “Ese tampoco es un lugar digno. La familia Kosala desciende de gente sin casta[5]; no son puras ni la familia del padre, ni la de la madre. Sus intereses son bajos, y su linaje innoble. Además, no tienen un ilimitado almacenaje de riquezas y tesoros. Por tanto, ese no es un lugar digno para que el bodhisatva nazca.” [21]

Algunos dijeron: “La familia del rey de Vatsa es rica, próspera, y feliz. Es un lugar digno para que el bodhisatva sea concebido.”
Entonces otros replicaron a esto: “Ese no es un lugar digno. La familia del rey de Vatsa es vil, violenta, y sin ninguna nobleza. Son ilegítimos por nacimiento, y lo que han conseguido no procede de las acciones nobles de sus padres. El rey es un nihilista. Por tanto, es tampoco es un lugar digno para que el bodhisatva sea concebido.”

Algunos sugirieron: “La ciudad de Vaisālī es rica, próspera, y feliz. Es un sitio agradable y lleno de gente; es como un palacio celestial: con terrazas, balcones, arquitrabes, luceros, pabellones frescos, edificios de varios pisos, y palacios. Esta ciudad está llena de flores abiertas en plena floración, rodeada de jardines, y en medio de bosques. Este es un lugar digno para que el bodhisatva sea concebido.”
Pero otros replicaron. “Ese tampoco es un lugar digno. Ellos no se hablan uno a otro con decoro; no practican el Dharma, ni respetan a sus superiores, mayores, líderes, o a quienes son sus iguales. Cada uno piensa que él es el rey; no adoptando nunca el papel de estudiante o aceptando el Dharma. Por tanto, esa ciudad tampoco es un lugar digno de un bodhisatva.”

Otros dijeron: “La familia Pradyota, en la ciudad de Ujjayinī, posee un gran ejército y muchas caballerías. Ellos han salido victoriosos en la batalla contra sus enemigos. Este es un lugar adecuado para que nazca un bodhisatva.”
A esto le llegó la respuesta: “Ese no es un lugar digno puesto que ellos son maliciosos y violentos. No son civilizados, son salvajes e impetuosos; sin preocupación alguna por las consecuencias de sus acciones. Por tanto, ese no es un lugar adecuado para que sea concebido un bodhisatva.”

Algunos dijeron: “La ciudad de Mathurā es rica, próspera, y feliz. Es populosa, está llena de gente. [22] El palacio real del Rey Subāhu, quien dirige un ejército de valientes guerreros, es un lugar adecuado para que nazca un bodhisatva.”
Otros replicaron: “Ese no es un lugar digno. Este rey nació en el seno de una familia con visiones erróneas. No hay duda de que él es como un salvaje; por eso es inapropiado que el bodhisatva nazca en su última dentro esa familia con visiones erróneas. Por lo tanto, ese tampoco es un lugar adecuado para que sea concebido el bodhisatva.”

Algunos sugirieron: “El rey de la ciudad de Hastināpura nació en la familia descendiente de Pāndu. Este rey es valiente, lleno de coraje, y hermoso. Ha vencido a los ejércitos enemigos. Por tanto, es adecuado para el bodhisatva ser concebido dentro de esa familia.”
A esto otros dijeron: “Esta familia tampoco es digna del bodhisatva. Los nacidos dentro de la familia Pāndava, tienen su genealogía confusa. Ellos dicen que Yudhisthira es el hijo de Dharma; que Bhīmasena es hijo de Vayu; que Arjuna es hijo de Indra; y que Nakula y Sahadeva son hijos de los dos Asvins. Por tanto, no es adecuado que el bodhisatva sea engendrado en esa familia.”

Algunos dijeron: “La ciudad de Mithilā es hermosa en extremo, y próspera. Esta es la tierra gobernada por el Rey Sumitra, quien posee muchos elefantes, caballos, carros, infantería, y tropas. El también tiene una gran riqueza material, con grandes reservas de oro, plata, joyas, perlas, lapislázuli, conchas, cristales, corales, oro fino, y muchas otras riquezas y pertenencias. El es poderoso, tiene un ejército que no teme a los reyes de los países circundantes. El tiene muchos amigos, y se deleita en el Dharma. Este es un lugar adecuado para que sea concebido el bodhisatva.”
Pero otros replicaron: “Ese tampoco es un lugar apropiado. Resulta indudable que el Rey Sumitra tiene esas buenas cualidades. Sin embargo, es extremadamente anciano, así que realmente es incapaz de engendrar un hijo. Además, el ya tiene muchos hijos. No es apropiado que el bodhisatva sea concebido dentro de esa familia.”

De este modo, los bodhisatvas y los dioses observaban a todas las familias ilustres que podían ser encontradas en todos los dieciséis reinos de Jambudvipa, [23] y vieron que todas ellas eran inadecuadas.

Cuando ellos estaban considerando esto, un hijo de los dioses llamado Jñanaketudhvaja, quien estaba establecido firmemente en el Mahayana, y que no podía ser apartado de la Iluminación, habló a la gran asamblea de dioses y de bodhisatvas: “Venid amigos míos. Vayamos ante el bodhisatva y preguntémosle cuales son las cualidades preciosas que ha de tener una familia para que un bodhisatva pueda tener su renacimiento final en ella.”
“Excelente”, replicaron. Y todos ellos fueron ante el bodhisatva, y con las palmas de las manos juntas, le preguntaron: “Ser sublime, ¿Cuáles son las cualidades que ha de poseer una familia preciosa para que un bodhisatva tome su último renacimiento en ella?”

Mirando a la gran asamblea de bodhisatvas y a la gran asamblea de dioses, el bodhisatva se dirigió a ellos de la siguiente forma: “Amigos, la familia en la cual un bodhisatva realiza su último nacimiento ha de tener sesenta y cuatro cualidades excelentes. ¿Cuáles son estas sesenta y cuatro?

Esta familia tiene que ser noble, y tiene que ser conocida por todos. No ha de ser mezquina o ser propensa a la violencia. Tiene que ser de buena casta y de buen clan. Tiene que tener uniones maritales excelentes; con uniones maritales excelentes en el pasado, y con uniones maritales entre individuos que son puros. Esas uniones maritales tienen que ser entre personas que son ambas puras, bien conocidas por todos, y famosas por su gran poder. En esta familia tiene que haber muchos hombres y muchas mujeres. Tienen que ser intrépidos, y no comunes o acobardados. No tienen que ser codiciosos, pero si disciplinados. Tienen que ser sabios y han de velar por los ministros. Esta familia tiene que ser creativa, y por ello capaz de disfrutar de los placeres mundanos. Esta familia debería de ser firme en sus amistades, y debería de salvaguardar la vida de todos los seres del reino animal.  [24] Deberían de ser agradecidos, y saber cómo comportarse de manera apropiada. No deberían de estar movidos por la ambición, el enfado, la ignorancia, o el miedo. Deberían de estar temerosos de involucrarse en la práctica de acciones no virtuosas. No deberían de permanecer en la ignorancia. Esta familia debe de ser benevolente e industriosa. Tienen que tener tendencia a dar, ser generosos, y recordar la amabilidad recibida de otros. Tienen que ser fuertes físicamente, con gran poder y fuerza, indudablemente una fuerza suprema. Tienen que hacer ofrendas a los sabios, a los dioses, a las estupas, y también rendir homenaje a sus antepasados. No deben de albergar rencor.
Esta familia tiene que ser famosa en las diez direcciones, y tener un amplio séquito. En ella no ha de haber división. Tiene que ser sin par. Esta familia tiene que ser la más antigua y la más ilustre entre todas las familias. Tiene que ser poderosa, y conocida como tal. Tienen que respetar a sus padres, madres, ascetas, y brahmines. Tienen que poseer grandes cantidades de tesoros y de grano. Tienen que poseer gran cantidad de oro, y muchas joyas, gemas, perlas, lapislázuli, conchas, cristales, corales, oro fino, plata, y muchas otras riquezas y pertenencias. Tienen que tener muchos elefantes, caballos, camellos, bueyes, y ovejas. Tienen que tener muchos sirvientes varones, muchas sirvientes femeninas, oficiales, y trabajadores. Esta familia tiene que ser difícil de vencer. Tiene que ser una familia de monarcas universales. Tiene que ser ayudada, en gran medida, por las raíces de virtud acumuladas en el pasado. Tiene que descender de una familia noble, de una familia de bodhisatvas. [25] Indudablemente, esta familia tiene que ser irreprochable en lo referente a cualquier clase de acusación que tenga que ver con faltas vinculadas con el nacimiento de uno, tales como las que se encuentran es este mundo con sus dioses, demonios, brahmās, ascetas, y brahmines. Amigos, la familia de un bodhisatva en su existencia final, tiene que tener estas sesenta y cuatro cualidades.

Amigos, la mujer en cuyo vientre es concebido el bodhisatva en su existencia final, tiene que tener treinta y dos cualidades. ¿Cuáles son estas treinta y dos cualidades? Un bodhisatva que está en su existencia final tiene que ser concebido en el vientre de una mujer conocida por todos, y de conducta intachable. Tiene que provenir de una buena casta y de una buena familia. Debe de tener una figura excelente, un nombre excelente, y proporciones excelentes. No tiene que haber dado a luz previamente, y tiene que observar una moralidad excelente. Tiene que ser generosa, jovial, y hábil. Tiene que tener una mente clara, calmada, no tener miedo; estar instruida, ser sabia, honesta, y sin astucia. Tiene que estar libre de enfado, envidia, y codicia. No ha de ser burda, alguien que se distraiga fácilmente, o propensa al chismorreo. Tiene que ser paciente y tener un buen carácter, con una buena consciencia y sentido de la modestia. Debería de tener poco apego, rechazo, e ignorancia. Debería de estar libre de las faltas de las mujeres, y ser una esposa fiel. En su existencia final, un bodhisatva que está en su existencia final tiene que ser concebido en el vientre de una mujer que posea dichas cualidades excelentes.

Amigos, un bodhisatva no es concebido en el vientre de su madre mientras la Luna esté en menguante. Un bodhisatva en su existencia final tiene que ser concebido durante la Luna llena. En el día 15 de la Luna creciente, y en conjunción con la constelación Pusya[6], el bodhisatva será concebido en el vientre de su madre, la cual está observando el ayuno de posadha.  

[26] Los bodhisatvas y los hijos de los dioses, tras haber oído al bodhisatva explicar las cualidades de la familia pura y de la madre pura, pensaron para ellos: “¿Dónde puede encontrarse una familia con las cualidades expresadas por este ser santo?”
Ponderando esta cuestión, entonces pensaron: “El lugar de los Sakya es rico, próspero, agradable, y placentero. Tiene cosechas abundantes, y está llena de gente. Suddhodana, su rey, desciende de familias puras por parte de madre y de padre. Su esposa también es pura. Sus actos no están influenciados por las aflicciones; y posee cualidades físicas excelentes. Siendo extremadamente sabio, y estando en posesión de un mérito brillante, el rey viene de una familia ilustre y desciende de un linaje de monarcas universales. Tiene riquezas y tesoros incalculables, y joyas preciosas innumerables. Cree en el karma, y no sostiene visiones erróneas. Gobierna sobre todos los territorios del clan de los Sakya, y es honrado y reverenciado por todos los mercaderes, cabezas de familia, ministros, y personas en su corte. El es amable y hermoso; ni demasiado viejo, ni demasiado joven. Tiene un cuerpo delgado, y posee todas las cualidades excelentes. Posee firme conocimiento de los diversos oficios, de astrología, del ego, del Dharma, la verdad, el mundo, y los signos. Indudablemente él es un rey del Dharma que guía de acuerdo al Dharma.
La ciudad de Kapilavastu es la residencia de seres que han generado virtudes básicas. Todos los que han nacido allí son iguales en fortuna al rey. La esposa del Rey Suddhodana es Māyādevī, la hija de Suprabudha, un gobernante del clan de los Sakya. Es rica y joven. Indudablemente, ella está en la flor de la vida. Tiene una figura excelente, y nunca ha dado a luz. No tiene hijos, ni hijas. Con una hermosa figura, es tan agradable a la vista como una bella pintura; está engalanada con joyas como una doncella celestial, libre de las faltas de las mujeres. Siempre dice la verdad, con palabras que son suaves, gentiles, fiables, y todo ello más allá del reproche. Su voz es como la del cuco; es recatada, y solo pronuncia palabras dulces  y agradables.

Māyādevī es reservada; libre de enfado, orgullo, vanidad, y arrogancia. Ella no se indigna, ni es celosa; lo que dice es adecuado, y da con generosidad. Ella es disciplinada y está dedicada a su marido; sin sentir ningún interés por otros hombres. Su cabeza, orejas, y nariz son perfectamente simétricas. Su cabello es negro como una abeja; con una hermosa frente y bellas cejas. Siempre sonriente, ella habla con sinceridad, y sus palabras son medidas y agradables al oído. [27] Es rápida para aprender, honesta, y sincera; libre de astucia, artificio, y falsedad. Es modesta y decente, constante y cumplidora, sin propensión pereza o a la charla frívola. Tiene poco apego, rechazo, e ignorancia; es paciente y de buen carácter, atendiendo cuidadosamente sus miembros, ojos, y mente. El movimiento de sus extremidades es armonioso, y su piel es suave como el paño de kācalindi. Sus ojos son tan puros como los pétalos de una flor loto recién abierta. Su nariz está bien formada, con una hermosa estructura. Sus miembros son firmes y gentilmente curvados como el arco de un arcoíris. Cada parte de su cuerpo es bella, y está libre de faltas. Es atractiva, con los labios tan rojos como el fruto del bimba; su cuello es ceñido y está cubierto de joyas, y sus dientes son tan blancos como las flores del jazmín y sumana. Tiene los hombros caídos, los brazos delgados; una cintura es curvada como un arco, con sus lados perfectos, y un ombligo profundo. Sus caderas son suaves, amplias, redondas, y firmes. Su cuerpo es tan firme como una diamante.  Sus muslos son tan bien proporcionados como la trompa de un elefante, y sus pantorrillas son como las de un antílope. Las palmas de sus manos y las de sus pies son como laca líquida. Resulta atractiva para los demás, sin faltas visuales. Seductora para la mente y agradable a la vista, su forma corporal es superior incluso cuando se la compara con otras mujeres bellas. Indudablemente, es sin par. Puesto que su forma es como una emanación mágica, la palabra māyā, significando “emanado mágicamente” forma parte de su nombre. Ella también es diestra en todas las artes. Como una doncella celestial en el jardín de Indra, Māyādevī reside en las estancias reservadas para las mujeres del Rey Suddhodana. Ella es adecuada para ser la madre del bodhisatva. Así pues, parece ser que la pureza descrita por el bodhisatva solo puede encontrarse en el clan de los Sakya.”

Con respecto a esto, se dice:

“En el palacio de Dharmoccaya, el ser puro
Se sentaba sobre un trono de león llamado Dharma Sublime.
Dioses y bodhisatvas de gran renombre, iguales en fortuna a él,
Se reunían en torno al Sabio.

Sentados allí, ellos albergaban este pensamiento:
“¿Qué familia es pura y adecuada
Para que el bodhisatva nazca en ella?
¿Y dónde están el padre y la madre con esas cualidades puras?”

Mirando por todo Jambudvipa,
Considerando todas las principales familias reales, y los linajes reales,
Encontraron que tenían faltas. Cuando consideraban esto,
Vieron que solo el clan de los Sakya estaba libre de faltas. [28]

El Rey Suddhodana pertenece a una familia real,
Desciende de una línea pura de monarcas.
Es rico, próspero, y libre de conflictos,
Un ser santo, recto y se ha ganado el respeto.

Todos los demás seres en la ciudad de Kapilavastu
Son honrados y de mente pura.
La ciudad está repleta de jardines, arboledas, y palacios;
La bella ciudad de Kapilavastu es el lugar de nacimiento más adecuado.

Todos sus habitantes son grandes y poderosos,
Con la fuerza de dos elefantes, e incluso de tres.
Han perfeccionado su entrenamiento en la arquería y las armas,
Y no dañan a los demás, incluso a costa de su vida.

La esposa del Rey Suddhodana es la suprema
Entre mil mujeres sublimes.
De apariencia encantadora, es como una emanación mágica
Ella es llamada por ello Māyādevī[7].

Su cuerpo es tan hermoso como el de una doncella celestial,
Con una grácil silueta y unos miembros perfectamente formados.
Ningún ser, sea un dios o un humano,
Se cansa de contemplar a Māyā.

Ella no alberga apego u odio;
Es dulce y tierna; y su palabra es honesta y melosa.
No es dura ni desabrida, sino que es extremadamente tranquila.
Nunca frunce el ceño, y en su rostro siempre hay una sonrisa.

Con una buena consciencia, y sentido de la modestia, practica el Dharma.
Está libre del orgullo y engreimiento; y no tiene tendencia al excesivo entusiasmo.
Puesto que no es envidiosa, y está libre de astucia y de artificio,
Ella se deleita en la generosidad, y sus pensamientos siempre son amorosos.

Ella cree en causa y efecto, y ha abandonado las acciones incorrectas.
Ella se adhiere a eso que es verdad, con un cuerpo y mente controlados.
Ella está libre de la multitud de faltas
Que se encuentran comúnmente en las mujeres en el mundo entero.

Indudablemente, Māyādevī no tiene rival.
No hay otra mujer entre los humanos que pueda igualarla,
Ni tampoco entre los gandharvas, ni entre los dioses.
Ella es digna de ser la madre del Gran Sabio.

Durante quinientas vidas, ella sola
Ha sido la madre del bodhisatva.
Lo mismo que el Rey Suddhodana ha sido su padre.
Así pues, ella posee todas las cualidades de una madre digna.

Tan disciplinada como un asceta, sigue un código de conducta estricto.
Y mientras sigue su propia conducta, comparte las obligaciones de su marido.
Ella ha realizado su voto, que le fue dado a ella por el rey,
Pues ella se ha abstenido de relaciones sexuales durante treinta y dos meses. [29]

Donde quiera que ella esté, bien sea sentada o de pie,
Acostada o en movimiento, todos esos lugares
Llegarán a estar llenos de una luz brillante
Que es un resultado de su dedicación a las acciones virtuosas.

Ningún ser, sea un dios, un semidiós, o un humano,
Es capaz de mirarla con una mente lujuriosa.
Todos la miran como si fuera su madre o su hija,
Pues ella sigue la conducta correcta, y está dotada con cualidades nobles.

Debido a las acciones virtuosas de Māyādevī,
El vasto imperio del rey incrementa en prosperidad,
Y los reinos vecinos no pueden comparársele.
El renombre y la fama como gobernante también continúan incrementándose.

De esta forma, Māyādevī es un recipiente adecuado.
De este modo, el ser santo es supremamente bello.
Así pues, puesto que los dos están dotados de cualidades supremas,
Uno será el hijo, y otro es digno de ser la madre.

Ninguna otra excepto Māyādevī, quien está dotada con las cualidades más supremas,
Y tiene la fuerza de diez mil elefantes,
Ninguna otra sería capaz de llevar en su vientre
Al hombre supremo de Jambudvipa.”

Con estas palabras de alabanza, los hijos de los dioses
Y los bodhisatvas, con su vasto conocimiento,
Proclamaron a la sublime Māyā como madre,
Diciendo: “Ella es adecuada para dar a luz a la alegría del clan de los Sakya.”


Esto concluye el Capítulo tres, sobre “La pureza de la familia.”













[1] Infantería, caballería, arqueros, y carros.
[2] Pratyekabuda.
[3] Sudra.
[4] Ksatriyas.
[5] Matāngas.
[6] Constelación de Cáncer.
[7] La Diosa emanada mágicamente.